Debacle europea en la Laver

La Laver Cup comenzó su sexta edición en Vancouver (Canadá) con la gran incógnita del desempeño del equipo formado por tenistas europeos. Acumulaban bajas tan sensibles como Novak Djokovic, Carlos Alcaraz, Daniil Medvedev, entre otros. De las nueve raquetas procedentes del viejo continente que conforman el top-10, únicamente está disputando esta competición Andrey Rublev. En la previa había muchas voces que señalaban que tras seis ediciones de este torneo, el equipo del resto del mundo tenía el mejor combinado. Tras el primer día, quedó constatado que son los favoritos para revalidar el título.

Abrían el primer día de competición, el francés Arthur Fils, número 44 del mundo, que entró en último momento sustituyendo a Stefanos Tsitispas, y el estadounidense Ben Shelton, 19º, que acabó venciendo 7-6 (4) y 6-1 en 1h 19 en un duelo de jóvenes tenistas con un futuro brillante por delante. Fue un duelo igualado hasta el tie break en el que el saque del americano se impuso al juego de fondo de pista del europeo. A partir de ahí, no hubo partido ya que el francés entregó en bandeja el primer punto para el equipo del resto del mundo.

Los otros dos partidos de individuales tuvieron sabor hispano y francés. En primer lugar, saltaron el español Alejandro Davidovich, 25º, y el argentino Francisco Cerúndolo, 21º, en un encuentro de idas y venidas que acabó cayendo de lado del sudamericano 6-3 y 7-5 en 1h 40. En segundo lugar, y antes de dejar paso al dobles disputaron el tercer encuentro del día el francés Gael Monfils, 142º, y Felix Auger-Aliassime, 14º. El tenista local se dio un baño de masas y venció por 6-4 y 6-3 en 1h 25 que le servirá para coger confianza para el tramo final de temporada tras un año para olvidar.

Por último, Arthur Fils volvió a saltar a la pista para jugar junto a Andrey Rublev en el dobles contra Frances Tiafoe y Tommy Paul. El resultado, el mismo que en los anteriores partidos. El equipo del resto del mundo se llevó el encuentro por 6-3, 4-6 y 10-6 para regocijo del público canadiense y lidera tras la primera jornada por 4-0. Sin embargo, no todo está perdido para Europa. Cada victoria cosechada el día inaugural supone un punto para los ganadores, mientras que en la segunda jornada cuentan dos puntos.