Martínez ejerce de número uno y da a España el primer punto

En una Selección española algo de circunstancias por las ausencias, solo un hombre repetía de los cinco que disputaron el pasado mes de noviembre en Málaga la Final a 8 de la Copa Davis: Pedro Martínez, que tenía en esta primera ronda de los Qualifiers de la copa del mundo de tenis el honor de ser el número uno de la Armada ante la baja de Carlos Alcaraz. Y el valenciano, de 27 años y 44º del ranking mundial, asumió con creces la responsabilidad de liderar a España para abrir la eliminatoria frente a Suiza y darle a su país el primer punto del duelo al superar a Dominic Stricker, 22 y 287º, por 6-4 y 7-6 (7) en 2h05. Ahora, Roberto Carballés, que se medirá con Jerome Kym, tendrá la opción de conseguir que la Selección acabe el primer día con pleno de triunfos y a tan solo un tanto de amarrar el pase a la segunda ronda.

En el Swiss Tennis Arena de Biel, una coqueta cancha que pertenece a la Federación Suiza de Tenis en una localidad de menos de 60.000 habitantes, España se movió en un ambiente atípico en los últimos años, pues era la primera eliminatoria de Copa Davis que jugaba en el extranjero desde 2018, cuando viajó hasta Lille para medirse con Francia. Desde entonces, la Armada siempre había ejercido de local, ayudada porque la fase final del torneo se disputaba dentro de sus fronteras, pero el cambio de formato para este 2025 en la copa del mundo de tenis, con el regreso de los duelos directos con local y visitante, obligó a salir de la zona de confort. Cierto es que la hinchada suiza tampoco achuchó en exceso (caben 2.500 personas y, siendo generoso, el aforo llegaba al millar), e incluso hubo un buen puñado de aficionados españoles que alentaron a su jugador. De hecho, hasta sorprendió que Martínez no jugase de rojo, sino que lució una indumentaria blanca y amarilla fosforito, para no coincidir con los colores locales.

“¡Ánimo, Pedro!”, se escuchó desde la grada en algún momento, transmitiendo calor a un jugador que en unos años ha ido ganando galones en el equipo español. Martínez se estrenó en una Davis en 2022, aunque su rol se limitó al dobles, y no fue hasta el año pasado, en la fase de grupos de Valencia, cuando le llegó la oportunidad de jugar el individual. Por ranking es el segundo mejor español del momento, aunque en el pasado David Ferrer optó por Roberto Bautista e incluso Rafa Nadal para el singles. Ahora, en Biel, él es el número uno. Respondió con un buen triunfo sobre un Stricker que es el 287º mundial por lesiones, pero ni mucho menos ese puesto refleja su nivel real. El suizo es un pegador nato, corpulento y potente, aunque sufre cuando golpea en movimiento. Eso lo detectó Martínez para hacerle sufrir, ayudado también por unas condiciones del Swiss Tennis Arena que, a pesar de ser indoor, no son demasiado rápidas y le viene bien.

Las oportunidades de quiebre para el español llegaron desde el primer momento, aunque no las aprovechó y se llevó el susto de que el primer break se lo apuntó Stricker. Lejos de ponerse nervioso, Pedro reaccionó con un parcial de 1-5 que le permitió anotarse el primer set. La segunda manga tuvo muchas menos alternativas, con ambos jugadores muy sólidos con su servicio y apenas sin oportunidades de quiebre. El nivel de tenis se igualó por lo alto, y es que se vieron grandes juegos. Aquello obligó a que se tuviese que resolver en un desempate en el que siguió mandando el servicio. Martínez, que durante todo el partido planteó una gran estrategia, pillando muy bien las subidas de su rival y tirando bastante de globos, no perdió la calma en un tie-break en el que primero desaprovechó una bola de partido, después salvó un punto de set en contra y, por fin, liquidó al resto el encuentro.

Ampliar

España dio a través de su número uno, que estrenó su casillero de victorias en individual de la Davis, el primero de los tres pasos que necesita para acceder a la segunda ronda de unos Qualifiers que no han podido comenzar mejor. El segundo paso lo puede dar esta misma tarde Roberto Carballés, 51º mundial y que a sus 31 años debutará en la copa del mundo de tenis, si vence a Jerome Kym, 136º del equipo suizo y número uno por ranking de los helvéticos. En caso de superar a Suiza, la Selección se jugaría en septiembre el billete a la Final a 8 de Bolonia ante el ganador de un Serbia-Dinamarca que marcha 2-2 y que se decidirá en el quinto y último encuentro.

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