Las condiciones extremas revientan a Sinner: retirado entre calambres

Ya sufrió muchísimo con las condiciones extremas en su debut en la presente edición del Masters 1.000 de Shanghái, y en su segundo partido en el torneo chino el físico de Jannik Sinner dijo basta. El italiano, de 24 años y segundo del ranking mundial, se vio obligado a retirarse de su encuentro de tercera ronda frente a Tallon Griekspoor (6-7 (3), 7-5 y 3-2 en 2h41) por unos calambres que prácticamente le hicieron imposible caminar, siendo la última víctima de un evento que está resultando extenuante para los tenistas por las durísimas condiciones a las que se enfrentan. Sinner se retiró pasada la medianoche en Shanghái, donde el termómetro rozaba los 30 °C y un exagerado 90% de humedad. Su prematuro adiós, además, tiene consecuencias importantes en el ranking mundial, y es que el número uno a final de año se le pone muy de cara a Carlos Alcaraz.

Ante Daniel Altmaier, en su estreno en Shanghái, el de San Cándido ya se encontró mareado y con ganas de vomitar, y dos días después las malas sensaciones regresaron a su cuerpo durante un partido durísimo, muy físico, que se jugó a base de palos y que machacó a sus dos protagonistas. Incluso sufrieron a la hora de agarrarse a la pista, que estaba muy resbaladiza por la humedad y, sobre todo, por la multitud de gotas de sudor que Sinner y Griekspoor iban dejando a su paso. Italiano y holandés tuvieron que visitar el vestuario para cambiarse por completo, hasta los calcetines, en los dos descansos entre sets, y finalmente fue Jannik el que no pudo más, con los sonidos de los ventiladores que trataban de paliar el calor como único ruido que se escuchaba en un estadio enmudecido ante lo que sucedía.

Hasta la retirada, Sinner se había llevado ya un buen susto de Griekspoor, que le estaba compitiendo muy bien: le forzó a ganar el primer set en un impecable tie-break, y consiguió arrebatarle la segunda manga con un quiebre brillante (antes, el holandés salvó tres bolas de break que podrían haberle puesto el triunfo en bandeja a Jannik, que se habría ahorrado los problemas físicos que vinieron a continuación). Con 1-2 a su favor en el tercer set, cuando ya daba la sensación de estar al límite (“él no está cómodo, sigue empujando”, le habían avisado a Tallon desde su palco unos minutos antes), las piernas del italiano comenzaron a fallar. Apenas podía apoyar el número dos del mundo, que perdió su juego al resto sin oposición y entregó su turno de saque, cometiendo varias dobles faltas ya que casi no podía ni sacar. Estremeció la imagen de Sinner acudiendo a su banquillo, apoyándose de su raqueta contra el suelo, como si fuese un bastón, y de un fisioterapeuta que poco pudo hacer por lo agarrotado que estaba Jannik, que no pudo seguir con el encuentro.

“No es la forma en la que quieres ganar, las condiciones están siendo brutales toda la semana. Hemos tenido suerte de jugar por la noche, sin el sol... Lo siento por él, le deseo una pronta recuperación”, aseguró Griekspoor, de 29 años y 31º del ranking mundial, que logró su primer triunfo frente a Sinner tras perder sus seis primeros duelos ante él. Jannik, por su parte, se retiró en medio de un partido por segunda vez en lo que va de año (la otra fue la final de Cincinnati, ante Alcaraz), y por séptima ocasión en su carrera. El holandés, que llegaba a Shanghái inmerso en una racha de siete derrotas consecutivas, se enfrentará en octavos de final con el monegasco Valentin Vacherot, que también avanzó por una retirada, de Tomas Machac en este caso. El adiós de Sinner, producido en el mismo día en el que Taylor Fritz fue sorprendido por Giovanni Mpetshi Perricard (6-4 y 7-5 en 1h26), abre y mucho un Masters 1.000 de Shanghái en el que el de San Cándido tendría que haberse cruzado en semifinales con Novak Djokovic.

Con esta inesperada retirada, Sinner pierde de golpe y porrazo 950 puntos en el ranking ATP, ya que defendía el millar de campeón del año pasado, por lo que su desventaja con Alcaraz, que cedió 200 puntos al renunciar a participar en Shanghái, se amplía hasta los 1.340 tantos. Tiene muy de cara el español acabar el año como líder mundial por segunda vez en su carrera, tras 2022, ya que Carlitos apenas defiende 300 puntos en lo que queda de año (100 en París y 200 en las Finals), por lo que puede sumar muchos más. Sinner, por su parte, tenía previsto participar en el ATP 500 de Viena (del 20 al 26 de octubre), donde le puede recortar medio millar a Alcaraz, no defiende nada en el Masters 1.000 de París y sí que conserva 1.500 puntos por ser el vigente campeón de las ATP Finals.

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