Zverev le amarga a Alcaraz el debut en las ATP Finals
El alemán, dos veces campeón, remonta para hacerse con un partido en el que casi siempre llevó la iniciativa. El español se la juega el miércoles contra Rublev.
“He venido aquí a mi 100%”. Lo dijo Carlos Alcaraz el pasado viernes en el día de medios de las ATP Finals. Pero la cuestión es que ese 100%, a estas alturas de la temporada, se ve que no le da para vencer a rivales de la categoría y la experiencia en el torneo que aúna Alexander Zverev, con sus seis participaciones en los últimos siete años y dos títulos de campeón (2018 y 2021). El alemán de 26 años remontó para obtener el triunfo en un partido, primero del Grupo Rojo, en el que llevó casi siempre la iniciativa: 6-7 (3), 6-3 y 6-4 en 2h31.
El miércoles se las verá con el ruso Daniil Medvedev, que pudo con su compatriota Andrey Rublev (6-4 y 6-2), que será el rival de Carlitos, con la necesidad imperiosa de ganarle para no caer eliminado. “Creo que Carlos es alguien al que no le vas a ganar muchos puntos desde el fondo, tenía que servir bien, hacer muchos saques directos, meter primeros y arriesgar con mi segundo a veces; ha valido la pena y estoy feliz por estar 1-0″, dijo Alexander.
El encuentro entre Alcaraz y Zverev fue un choque de tendencias opuestas. El español va con el depósito en la reserva después de una temporada muy exigente en la que ha hecho esfuerzos titánicos para discutir la hegemonía de ese monstruo que es Novak Djokovic, con quien ha peleado por los grandes títulos y por el número uno hasta el final. Le superó en Wimbledon, el punto álgido de un gran curso para Charly, que últimamente ha tenido diversas molestias (fascitis plantar, espalda…). Ahora, encadena tres derrotas seguidas (contra Dimitrov en Shanghái, ante Safiullin en París más la de este lunes), algo que no le ocurría desde 2021, cuando perdió en la segunda ronda del Challenger de Gran Canaria 2 (Trungelliti) y en los estrenos de Acapulco (Zverev) y de Miami (Ruusuvuori).
Zverev, por el contrario, ha ido de menos a más después de volver a jugar en Australia el pasado mes de enero tras un periodo de baja por lesión de más seis meses y parece que ha llegado a Turín en su pico de forma, tras una segunda parte del año notable para él, con títulos en Hamburgo y Chengdú, semifinales en Roland Garros, Halle, Cincinnati y Pekín, y cuartos en el US Open, donde perdió, precisamente, contra Alcaraz.
Superioridad
El caso es que en esta ocasión, Sascha fue superior, empezando por el saque (16 aces y un 79% de puntos ganados con primeros). Pero también aventajó a Alcaraz en cuanto a movilidad, aunque por poco le cuesta una lesión en un mal apoyo durante el sexto juego del tercer set. Zverev pasó varias veces a Carlitos en algunas subidas del murciano a la red, puso bolas imposibles en las líneas y exhibió un dinamismo como el que se le veía en la gran campaña de tierra que hizo el año pasado antes de romperse el tobillo cuando peleaba por la final de Roland Garros con Nadal. La primera manga la perdió por un mal juego de servicio tras obtener su primer quiebre y un desempate desacertado. A partir de ahí, su dominio fue claro, igual que la frustración de un Alcaraz que pedía calma a su equipo; y, en el tercer parcial, al teutón solo se le escaparon ocho puntos con su saque. No lo tiene fácil el número dos para alcanzar la culminación triunfal que tuvo en el Masters Sub-14 de 2017 y en las NextGen ATP Finals de 2021, pero hay que seguir confiando en él. Se lo merece.
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