La vida sin Djokovic en Serbia
“Con su presencia todo es más fácil”, admite Viktor Troicki, el capitán serbio para las Finals de la Davis, que cree que es el momento de que otros den un paso adelante.
Cuando este miércoles (16:00, Movistar Deportes) Serbia salte a la pista verde de la Fonteta para medirse con España en su primer cruce de las Finals de la Davis, lo hará sin el hombre que más ha marcado su camino en esta competición en las dos últimas décadas. Se trata de Novak Djokovic, claro, que el lunes asistió a la boda de su hermano Djordje, los “motivos personales” que adujo para no acompañar estos días en Valencia al equipo balcánico, que entró con una wildcard por el veto a Rusia tras la invasión de Ucrania.
El de Belgrado completó con su renuncia la ausencia del Big Three al completo, con Nadal fuera para cuidar un cuerpo castigado tras tantos años de sobreesfuerzos y la Suiza de Roger Federer sin plaza entre los 16 equipos de la fase de grupos.
Que Nole no esté significa que Serbia no puede contar con el segundo jugador que más puntos le ha dado en esta competición a lo largo de su historia (42, empatado con Tipsarevic y a uno de Zimonjic), el primero en inidividuales (38, cuatro más que Tipsarevic y 21 más que el actual capitán, Viktor Troicki), y el tercero que más eliminatorias ha jugado, 32, lejos aún de las 55 de Zimonjic, al que por edad (35 años ya) tiene muy complicado alcanzar. Si el tenis serbio cuenta con una Ensaladera en su haber, es en gran parte gracias al ‘Djoker’, que ganó 7 de los 13 puntos (en cuatro eliminatorias solo perdió en el dobles de semifinales contra los checos Berdych y Stepanek) en el camino al título en 2010.
Los ‘plavis’, aun sin su líder deportivo y espiritual, están bien pertrechados con Miomir Kecmanovic, Filip Krajinovic, Laslo Djere y Dusan Lajovic, todos en el top-100 mundial, y el especialista en dobles Nikola Cacic, pero da la sensación de que les va a faltar un jugador diferencial cuando se jueguen las habichuelas. De todos los citados, el mejor rankeado (33º) es Kecmanovic, que solo luce un partido Davis en su historial, el perdido el año pasado en cuartos ante el kazajo Kukushkhin. Por suerte para ellos, parece que Carlos Alcaraz, aterrizado este martes en Valencia, no llegará a tiempo para plantarles cara en el que se intuye el cruce más disputado del grupo B.
“Quiero darle la enhorabuena por ganar su primer Grand Slam y ser primero del mundo. Ha jugado un gran tenis este año, lo merecía. Es un trabajador y es genial verle cosechar frutos tan pronto en su carrera. Si está para jugar el miércoles, obviamente será diferente, pero estamos preparados”, comentaba el lunes al respecto Trociki. El patrón de esta Serbia quitó hierro a la baja de Djokovic preguntado por AS: “Con su presencia todo es más fácil obviamente. Nos ha ayudado mucho, ganando muchos partidos, pero no siempre puede estar aquí”. Troicki cree que ha llegado el momento de que la nueva generación (aunque salvo Kecmanovic todos son jugadores con mucho recorrido ya) dé un paso adelante: “Tienen que asumir la responsabilidad. En el futuro habrá muchos partidos sin él (Djokovic). Tenemos que aceptarlo y que los jóvenes lo hagan lo mejor posible”. En cualquier caso, aseguró, la presencia de Novak se siente pese a la distancia, porque “está detrás” de sus compañeros, “apoyando”.
La vida sin Djokovic podría ser dura para Serbia, pero en ningún caso el equipo va a mostrar públicamente debilidad por este asunto. ”Es nuestro tercer día y los entrenamientos van bien. Estamos muy motivados, entrenando a gran nivel. Tenemos un rival duro el miércoles, pero estamos listos. Comparado con Madrid también es una gran cancha y tenemos ganas de verla llena de aficionados”, apunta Troicki. La pista dictará si hay ‘Noledependencia’ o no en una Serbia que, pase lo que pase, necesitará ir trabajando en el relevo para su primer espada.