Badosa arrasa con Kalinskaya y ya está en octavos
La española alarga su racha triunfal sobre suelo estadounidense con una contundente victoria sobre la rusa y buscará los cuartos ante Putintseva.
El estado de gracia está plenamente instaurado en Paula Badosa, que en Estados Unidos ha conseguido recuperar un nivel digno de las mejores raquetas del circuito WTA. La española, de 26 años y 36ª del ranking mundial, inauguró su andadura en la presente gira norteamericana con título en Washington, el primero que capturaba desde 2022, y ahora en el WTA 1.000 de Cincinnati continúa a un nivel excelso, uno muy similar al que le valió para ser segunda del mundo. Este jueves, Badosa accedió a la tercera ronda del torneo de Ohio al superar a la rusa Anna Kalinskaya, de 25 años y 13ª favorita, por un contundente 6-3 y 6-2 en apenas 64 minutos de un partido plenamente dominado por la española. En tercera ronda, Paula se medirá este viernes con Yuliya Putintseva, que dio la sorpresa al superar a Coco Gauff.
Ya son ocho triunfos en los últimos nueve partidos de Paula, con la única mancha de la derrota en segunda ronda de Toronto, donde llegó fatigada después de su éxito en Washington, frente a Jelena Ostapenko. En Cincinnati, torneo en el que Badosa suma ya dos victorias incontestables, la de Begur alcanza la tercera ronda de un WTA 1.000 por segunda vez en lo que va de temporada (en Roma hizo octavos de final), además de haber sumado este jueves su tercer triunfo sobre una rival del top-10 en el presente curso. Lejos queda el calvario de lesiones en la zona vertebral que apartó a la catalana durante la segunda mitad de la pasada temporada y que también le lastró durante el inicio de 2024. El físico le ha dado una tregua a Badosa, que ha respondido desplegando un tenis de muchos quilates.
La última muestra de ello fue este mismo jueves, con Badosa pasando por encima de Kalinskaya, una de las jugadoras más regulares del año. Paula hizo de su defensa su mejor ataque, y es que desesperó a la rusa llegando a todas las bolas y poniendo en juego todo lo que salía de su raqueta. Además, la española estuvo maravillosa con el saque y con la derecha. Su nueva versión pasa por hacer los intercambios más cortos, y de momento le está funcionando. Badosa se hizo fuerte con su primer servicio (85% de puntos ganados) y estuvo a la altura en un inicio igualado. Aprovechó la primera oportunidad de quiebre que tuvo, y su única desconexión fue el juego posterior, en el que un par de dobles faltas (siete en el partido, seguramente el único pero que se le puede poner) permitió a Kalinskaya recuperar el break. Desde entonces, el partido solo le perteneció a Paula, que ganó ocho de los diez siguientes juegos.
Se apuntó un nuevo break que le valió para ganar el primer set con un tremendo passing, y es que destacó la facilidad con la que encontró las líneas la española, tocada por una varita en esta gira norteamericana. Frenó el avance de Kalinskaya en el inicio del segundo parcial (cuatro de cinco bolas de break salvadas) y procedió a asestar el golpe definitivo. Dos roturas consecutivas para Badosa, que apenas empleó una hora en sumar una victoria de mucho mérito, un triunfo que carga más y más una mochila de confianza que empieza a rebosar. Estados Unidos está sacando la mejor versión de la española, que con esta victoria ya es virtualmente 34ª del ranking mundial. En la tercera fase, octavos de final realmente al tratarse de un WTA 1.000 de una semana, Badosa se medirá con la kazaja Yuliya Putintseva, que batió de forma sorprendente a la local y segunda favorita Coco Gauff (6-4, 2-6 y 6-4). El balance entre ambas es de 3-1 para la de Begur, que en Estados Unidos está prolongando su magnífico estado de gracia.
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