Casi siete meses después de compartir trofeo con la estadounidense Ann Li en el Grampians Trophy y en si tercera final de 2021, Anett Kontaveit por fin pudo celebrar un título en la pista y tras ganar con todas las de la ley en el último partido. Fue este sábado en el Tennis in the Land de Cleveland, donde la estonia de 25 años y 30ª del mundo, que venía de eliminar en semifinales a la española Sara Sorribes, se impuso a la rumana Irina-Camelia Begu (31 y 74ª) por 7-6 (5) y 6-4 en 1:55.

A principios febrero, el WTA 250 que se añadió en Melbourne para beneficiar a las jugadoras que habían tenido que pasar 14 días de confinamiento sin poder entrenarse, se alargó por culpa de la suspensión de una jornada debido al caso positivo por COVID-19 de un trabajador del hotel de los tenistas y no dio tiempo a que pudiera disputarse la final con al menos un día de antelación con respecto al Open de Australia. Por eso, Kontaveit y Li, ganadoras en semifinales, se repartieron el premio. Surrealista. Anett jugó más adelante la final en Eastbourne, sobre hierba, y perdió con la letona Ostapenko.

Por fin, en el estado de Ohio, pudo celebrar un éxito que se ganó a pulso en un torneo en el que fue la mejor, con victorias ante Davis, Garcia, Siniakova, Sorribes y Begu que la colocan en el puesto 28 del ranking. Su primer título WTA lo ganó, también en buena lid, en 2017, en Hertogenbosch.