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Curiosidades de Wimbledon: lo que hay que saber

Recopilamos de manera gráfica alguno de los detalles más importantes del Grand Slam de la hierba.

Wimbledon es el único de los cuatro Grand Slams que no organiza una federación nacional, como ocurre en Australia, Roland Garros y US Open, sino un club, en este caso el All England Lawn Tennis Club, fundado originalmente el 23 de julio de 1868 como una agrupación de croquet, deporte que consiste en golpear bolas de madera o plástico con un mazo, a través de pequeños arcos de metal enterrados en el campo de juego. Tiene un máximo de 500 miembros entre completos, vitalicios y honoríficos. En la última categoría se incluye a todos los campeones individuales.
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1. El único Grand Slam que organiza un club

Wimbledon es el único de los cuatro Grand Slams que no organiza una federación nacional, como ocurre en Australia, Roland Garros y US Open, sino un club, en este caso el All England Lawn Tennis Club, fundado originalmente el 23 de julio de 1868 como una agrupación de croquet, deporte que consiste en golpear bolas de madera o plástico con un mazo, a través de pequeños arcos de metal enterrados en el campo de juego. Tiene un máximo de 500 miembros entre completos, vitalicios y honoríficos. En la última categoría se incluye a todos los campeones individuales.

FOTO:PoolDIARIO AS
Hasta 2021, un comité de Wimbledon se reservaba el derecho de elegir a los cabezas de serie, tanto de individuales como de dobles, en función de sus actuaciones previas en la campaña de hierba, no exclusivamente por su posición en los rankings mundiales. El antiguo sistema hacía que, por ejemplo, Roger Federer, tuviera un puesto más alto que Rafa Nadal en el sorteo de los cuadros aunque el español estuviera por encima del suizo en la clasificación. Djokovic es el cabeza de serie número uno de la presente edición.
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2. Cabezas de serie por méritos hasta este año

Hasta 2021, un comité de Wimbledon se reservaba el derecho de elegir a los cabezas de serie, tanto de individuales como de dobles, en función de sus actuaciones previas en la campaña de hierba, no exclusivamente por su posición en los rankings mundiales. El antiguo sistema hacía que, por ejemplo, Roger Federer, tuviera un puesto más alto que Rafa Nadal en el sorteo de los cuadros aunque el español estuviera por encima del suizo en la clasificación. Djokovic es el cabeza de serie número uno de la presente edición.

FOTO:HANNAH MCKAYREUTERS
Uno de los aspectos más legendarios y a la vez controvertidos de Wimbledon es el Dress Code, el código de vestimenta que obliga a todos los jugadores a vestir con equipaciones en las que el color predominante sea el blanco, incluidas las zapatillas y todos los accesorios, como cintas para el pelo, muñequeras, gorras… Sólo se permiten pequeñas bandas de otros colores, de un máximo de 10 milímetros. A los socios e invitados del torneos se les exige acudir con chaqueta, corbata y pantalón 'de apariencia respetable'. A partir de 2023 las jugadoras pueden usar ropa interior de color semioscuro si así lo desean.
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3. El ‘Dress Code’

Uno de los aspectos más legendarios y a la vez controvertidos de Wimbledon es el Dress Code, el código de vestimenta que obliga a todos los jugadores a vestir con equipaciones en las que el color predominante sea el blanco, incluidas las zapatillas y todos los accesorios, como cintas para el pelo, muñequeras, gorras… Sólo se permiten pequeñas bandas de otros colores, de un máximo de 10 milímetros. A los socios e invitados del torneos se les exige acudir con chaqueta, corbata y pantalón 'de apariencia respetable'. A partir de 2023 las jugadoras pueden usar ropa interior de color semioscuro si así lo desean.

FOTO:HANNAH MCKAYREUTERS
Las pistas están sembradas con un 100% por ciento de raigrás perenne (desde 2001) para mejorar la durabilidad y fortalecer el césped, y así resistir mejor el creciente desgaste del juego. La altura debe ser exactamente de 8 milímetros. Cada año se utilizan nueve toneladas de semillas de césped. El desgaste de la pista, la dureza de la superficie y el rebote de la pelota se miden a diario. Las líneas que limiten el área de juego miden 50 milímetros, salvo las de fondo que tienen 100.
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4. El corte de la hierba

Las pistas están sembradas con un 100% por ciento de raigrás perenne (desde 2001) para mejorar la durabilidad y fortalecer el césped, y así resistir mejor el creciente desgaste del juego. La altura debe ser exactamente de 8 milímetros. Cada año se utilizan nueve toneladas de semillas de césped. El desgaste de la pista, la dureza de la superficie y el rebote de la pelota se miden a diario. Las líneas que limiten el área de juego miden 50 milímetros, salvo las de fondo que tienen 100.

FOTO:REBECCA NADENEPA
Los recogepelotas de Wimbledon, denominados con el acrónimo BBGs, son 250 voluntarios de diferentes colegios e instituciones británicas, incluida la asociación caritativa DR. Barnardos, que acoge a chicos y chicas en situación de vulnerabilidad. Las pelotas las suministra la firma Slazenger ¡desde 1902! Es el vínculo de patrocinio más duradero de la historia del deporte. Este año ha elaborado 54.250 bolas para el torneo.
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5. Los recogepelotas y Slazenger

Los recogepelotas de Wimbledon, denominados con el acrónimo BBGs, son 250 voluntarios de diferentes colegios e instituciones británicas, incluida la asociación caritativa DR. Barnardos, que acoge a chicos y chicas en situación de vulnerabilidad. Las pelotas las suministra la firma Slazenger ¡desde 1902! Es el vínculo de patrocinio más duradero de la historia del deporte. Este año ha elaborado 54.250 bolas para el torneo.

FOTO:LEON NEALREUTERS
Wimbledon es el Grand Slam con más tradiciones del circuito. Las hay tanto culinarias como de organización. Entre las primeras están las famosas fresas con crema que se venden en el estadio y que la gente consume a todas horas, no sólo en el momento del té de la tarde, a las 17:00. También de beben muchos litros de una sangría típica de Inglaterra, la Pimm’s. Son frecuentes los picnics en la Colina, el lugar donde se reúnen muchos espectadores que no tiene entradas para la pista central y que disfrutan de los partidos en una pantalla gigante, sentados o tumbados sobre la hierba de la cuesta más famosa del célebre mundial. Otra tradición es la cola para adquirir entradas en igualdad de condiciones con cualquiera.
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6. Tradiciones: fresas, sangría, la cola …

Wimbledon es el Grand Slam con más tradiciones del circuito. Las hay tanto culinarias como de organización. Entre las primeras están las famosas fresas con crema que se venden en el estadio y que la gente consume a todas horas, no sólo en el momento del té de la tarde, a las 17:00. También de beben muchos litros de una sangría típica de Inglaterra, la Pimm’s. Son frecuentes los picnics en la Colina, el lugar donde se reúnen muchos espectadores que no tiene entradas para la pista central y que disfrutan de los partidos en una pantalla gigante, sentados o tumbados sobre la hierba de la cuesta más famosa del célebre mundial. Otra tradición es la cola para adquirir entradas en igualdad de condiciones con cualquiera.

FOTO:CARL COURTAFP
En el domingo intermedio del torneo, conocido como ‘Middle Sunday’, no hay competición en Wimbledon, un caso único en la historia de los torneos de tenis que sólo ha tenido contadas excepciones cuando la climatología ha impedido el normal transcurso de las primeras jornadas del torneo, como ocurrió por última vez en 2016. Se estableció por un acuerdo alcanzado con los vecinos de la zona, para que ese día pudieran pasarlo con tranquilidad, sin las aglomeraciones ni el bullicio propio de la competición.
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7. El ‘Middle Sunday’

En el domingo intermedio del torneo, conocido como ‘Middle Sunday’, no hay competición en Wimbledon, un caso único en la historia de los torneos de tenis que sólo ha tenido contadas excepciones cuando la climatología ha impedido el normal transcurso de las primeras jornadas del torneo, como ocurrió por última vez en 2016. Se estableció por un acuerdo alcanzado con los vecinos de la zona, para que ese día pudieran pasarlo con tranquilidad, sin las aglomeraciones ni el bullicio propio de la competición.

FOTO:TOBY MELVILLEREUTERS
Roger Federer, con ocho títulos, y Martina Navratilova, con ocho, son los más grandes campeones de la historia del torneo. Lawrence Doherty (13) y Billie Jean King y la propia Navartilova, con 20, son los que más acumulan entre todos los cuadros. El campeón más joven fue Boris Becker en 1985 (17 años y 22 días) y la campeona más precoz fue Lottie Dod, que ganó en 1888 con 15 años y 285 días. En cuanto a trofeos consecutivos, los líderes siguen siendo William Renshaw y Navratilova, con seis.
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8. Federer y Navratilova

Roger Federer, con ocho títulos, y Martina Navratilova, con ocho, son los más grandes campeones de la historia del torneo. Lawrence Doherty (13) y Billie Jean King y la propia Navartilova, con 20, son los que más acumulan entre todos los cuadros. El campeón más joven fue Boris Becker en 1985 (17 años y 22 días) y la campeona más precoz fue Lottie Dod, que ganó en 1888 con 15 años y 285 días. En cuanto a trofeos consecutivos, los líderes siguen siendo William Renshaw y Navratilova, con seis.

Getty Images
España ha conquistado hasta el momento cinco títulos en Wimbledon: dos de Rafa Nadal (2008 y 2010), uno de Manolo Santana (1966), otro de Conchita Martínez (1994) y otro de Garbiñe Muguruza (2017). En cuanto a finalistas, Nadal lo fue otras tres veces (2006, 2007 y 2011), Lili Álvarez, tres (1926, 1927 y 1928), dos Arantxa Sánchez Vicario (1995 y 1996) y otra Muguruza (2015). Arantxa, además, ganó el título de dobles, junto con la checa Jana Novotna, en 1995.
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9. Cinco títulos españoles

España ha conquistado hasta el momento cinco títulos en Wimbledon: dos de Rafa Nadal (2008 y 2010), uno de Manolo Santana (1966), otro de Conchita Martínez (1994) y otro de Garbiñe Muguruza (2017). En cuanto a finalistas, Nadal lo fue otras tres veces (2006, 2007 y 2011), Lili Álvarez, tres (1926, 1927 y 1928), dos Arantxa Sánchez Vicario (1995 y 1996) y otra Muguruza (2015). Arantxa, además, ganó el título de dobles, junto con la checa Jana Novotna, en 1995.

FOTO:ADRIAN DENNISAFP
El partido que jugaron el estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut en la primera ronda de Wimbledon 2010 es aún el más largo de la historia del tenis. Duró 11 horas, 6 minutos y 23 segundos, y terminó con un resultado de 6–4, 3–6, 6–7(7), 7–6(3) y 70–68. Por aquel entonces no había tie-break (desempate) en el último set. El encuentro empezó el 22 de junio y acabó el 24. Entre los récords adicionales del choque está el de set más largo (el quito se fue a las 8 horas y 11 minutos); más juegos en un set (138 en el quinto), más juegos en un partido (183); mayor cantidad de saques directos en un encuentro (216)…
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10. Isner-Mahut, el partido más largo de la historia

El partido que jugaron el estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut en la primera ronda de Wimbledon 2010 es aún el más largo de la historia del tenis. Duró 11 horas, 6 minutos y 23 segundos, y terminó con un resultado de 6–4, 3–6, 6–7(7), 7–6(3) y 70–68. Por aquel entonces no había tie-break (desempate) en el último set. El encuentro empezó el 22 de junio y acabó el 24. Entre los récords adicionales del choque está el de set más largo (el quito se fue a las 8 horas y 11 minutos); más juegos en un set (138 en el quinto), más juegos en un partido (183); mayor cantidad de saques directos en un encuentro (216)…

FOTO:SUZANNE PLUNKETTREUTERS