NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

TENIS

Se cumplen 26 años de la puñalada a Mónica Seles

Ocurrió en 1993 durante un partido, cuando un hombre saltó de la grada y apuñaló por la espalda a la estadounidense en el torneo de Hamburgo.

Mónica Seles, tras ser apuñalada en Hamburgo en 1993.
Mónica Seles, tras ser apuñalada en Hamburgo en 1993.
ASTV

Hoy, 30 de abril de 2019, se cumplen 26 años del trágico suceso que vivió Mónica Seles y que, para muchos, arruinó su carrera tenística. En pleno partido en el torneo de Hamburgo, un espectador se inclinó desde la grada y apuñaló por la espalda a la estadounidense, dejando conmocionado al mundo del tenis.

Por entonces, Seles era la número 1 del mundo y su brillante trayectoria hacía presagiar que sería una de las grandes leyendas de este deporte, pero lamentablemente, ese incidente lo cambió todo. Günther Parch fue el agresor, al parecer, por la obsesión que tenía con Steffi Graf, a quien precisamente Seles había destronado como la reina del tenis.

Parch fue condenado a dos años de cárcel a ser cumplidos en libertad condicional por el tribunal de primera instancia de Hamburgo, una sentencia hizo aún más mella en la jugadora estadounidense: "Fue el momento más difícil de mi vida porque pasé de ser la número uno a sólo preguntarme cuándo jugaría mi próximo partido o de qué necesitaba practicar, a que me quitarán todo eso en un segundo y no saber si podría jugar de nuevo", explicó Seles en una entrevista para BBC.

Dominio en Grand Slams

Hasta el momento de recibir la puñalada, Seles había ganado siete de los últimos ocho Grand Slams en los que había participado (sólo perdió en Wimbledon contra Graf). Superó a su gran rival en este apartado, ya que se convirtió en la tenista más joven de 20 años en lograr dicha cifra de torneos major.

"Los primeros seis meses fueron un problema físico porque no podía moverme de la manera que yo quería. Después de eso, está claro que estuvo la parte psicológica, el trauma de que alguien te pudiera hacer algo así", explicó Seles al regresar a la competición, de la que estuvo alejada dos años tras lo ocurrido. En 1996 ganó el Open de Australia y volvió a ser número 1, pero jamás volvió a ser la misma que al inicio de su carrera.