La furia de Djokovic sofoca la rebelión del novato Thiem
El austriaco ganó el primer set tras un largo tie break, pero luego fue atropellado por el serbio, que lucha por recuperar el número uno: 6-7 (10), 6-0 y 6-2.
Dominic Thiem jugaba su primer partido en unas ATP Finals, el torneo de Maestros, y durante una hora y 10 minutos soñó con debutar a lo grande, con una victoria contra el gran Novak Djokovic, el número dos del mundo que lucha en Londres por recuperar el trono mundial que le arrebató hace unos días Andy Murray. Pero la rebelión del novato fue sofocada después en 52 minutos por la furia incontenible de Nole: 6-7 (10), 6-0 y 6-2. También sacó en algunos momentos el mal humor de años pasados (se enredó con un voluntario por una toalla). Eso a pesar de que en la grada le seguía, atento, su guía espiritual, el riojano Pepe Imaz.
Tras perder el primer set en un tie break muy largo, resuelto a favor de Thiem por 12-10, el serbio, enfurecido —con una herida en el dedo gordo de la mano derecha había rodado por el suelo tras un passing que no pudo alcanzar—, aniquiló a su rival con un set en blanco en un periquete (20'). Visto y no visto, superó a un Thiem entusiasta, pero que nada pudo hacer ante el repertorio de golpes y la solidez desde el fondo de la pista de Djokovic. En la primera manga, el austriaco había tuteado al vigente campeón del Masters, variando los servicios, sacando a pasear su derecha con mucha potencia y colocando dejadas con las que hizo que Djoker tuviera que agachar el lomo más de la cuenta.
Thiem pagó su insolencia en ese segundo set fulminante y en el tercero no pudo contener la rabia de uno de los mejores jugadores de siempre, que empezó a sentirse cómodo. En el tercer juego, Djokovic se cobró ya un break, celebrando casi cada punto a grito pelado, intimidando. Luego encadenó otro para el 5-2 y con su saque no perdonó. Alarido y 1-0 en su casillero del grupo Ivan Lendl.