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COPA DAVIS

Conchita Martínez: "Se llegó a un punto de no retorno"

La primera mujer capitana de Davis en España no será Gala León, sino Conchita Martínez. Debuta este viernes en Vladivostok, con el reto de volver al Grupo Mundial.

Conchita Martínez: "Se llegó a un punto de no retorno"

—¿Habló con los jugadores antes de dar el sí?

—Sí, era una situación delicada. Con tan poco tiempo, lo más importante era conocer su grado de implicación. También que fuese una propuesta firme, no solo para salvar la papeleta.

—Esto suena, pues, a proyecto a largo plazo…

—Eso espero. De momento haré mi trabajo lo mejor que sé hasta final de año, que cumple mi contrato. Si todos estamos contentos, espero seguir.

—No ha armado mal equipo con la premura de tiempo.

—No ha sido nada fácil, porque había que tomar decisiones nuevas sobre otros compromisos. Pero el mensaje para todos ha sido que somos un equipo. Entre todos hay que sacar esto adelante. Robredo, Andújar, Marc y Marrero son los que jugarán, pero David Ferrer quería ir, demostró su implicación aunque no se han cumplido los plazos con su lesión. Tommy asumió entrar por la emergencia y fue difícil prescindir de Dani Gimeno-Traver, a quien le hacía mucha ilusión jugar. Con la entrada de Robredo decidió no ir de quinto, cosa comprensible.

—Mala leche la de los rusos llevándoles a Vladivostok.

—Sí. Este tipo de desplazamientos provoca rechazos. Todos sabemos cómo está el calendario y que la semana próxima deben jugar en otra superficie y en la otra punta. Llevan pidiendo a gritos un cambio y deben escucharles porque es matador para el cuerpo de un tenista.

—¿Habló con Nadal?

—Después de perder en Wimbledon sólo piensa en reencontrarse con su tenis. Pasa por una situación difícil. Siempre después de lesionarse obtenía resultados en uno o dos torneos. Ahora, de repente, no entiende qué le ocurre. Es momento de reflexión. Se lo pensó (acudir a la Davis) pero no se vio.

—¿Percibió machismo cuando se nombró a Gala León? ¿O el problema era otro?

—Simplemente, se había llegado a un punto de no retorno.

—Ha vivido la crisis de la Federación desde dentro. ¿Ha sido muy difícil trabajar?

—El contacto directo que he tenido ha sido con las jugadoras. He viajado con ellas, pero estuve al margen de lo demás.

—Toni Nadal dijo en su momento que “no es normal que una mujer entre en el vestuario” o que no se imaginaba una “entrenadora de una Selección de fútbol”. Gala no está, pero la seleccionadora es otra mujer. ¿Cómo le suena esto?

—En una Copa Federación o Davis hay unos vestuarios para que se duchen los jugadores o jugadoras y cada equipo tiene una sala. La Copa Federación está llena de hombres y no hay ningún problema. Yo no voy a entrar en las duchas, evidentemente, ni de unos ni de otras. Se convive y ya está.

—Con Carlos Moyá se demostró que no era un asunto de quién fuera capitán. Tampoco acudieron los mejores. ¿Cómo se les puede reenganchar?

—Han llegado a un punto en el que ellos asumen su parte de culpa de que España se haya ido a segunda. A ninguno le gusta verse ahí. Ya están dando un paso al frente para arreglarlo. La prueba es que ya hay más implicación para Rusia y para la próxima, según me han demostrado, también la habrá.

—¿Son tan distintos el tenis masculino y femenino?

—El tenis es tenis, ni masculino ni femenino. Este último ha cambiado, con un estilo de pegar fortísimo con golpes planos y dentro de la pista, como hacen Sharapova o Muguruza. El masculino es algo diferente, pero el mismo deporte.

—Ha decidido repescar al encordador Xavi Segura, no ha querido a Julián Alonso como subcapitán. ¿Por qué?

—Esta es una etapa nueva. Cuando un equipo funciona bien tantos años y hay gente como Xavi con la confianza de los jugadores, no sé para qué iba a cambiar. Por lo demás, tampoco he tenido tiempo.

—Hay equipo para ganar la Davis y la Copa Federación. Un reto bonito…

—Sí, y sería fantástico. Ojalá. Por mí parte no tengan dudas de que daré el cien por cien.