Djokovic vence a Nishikori y va lanzado a por su cuarto título

Después de apuntarse seis juegos seguidos (de 1-1 en el primer set a 6-1 y 1-0), solo una inmensa ovación del público del O2 Arena sacó algo de la vía al tren expreso llamado Novak Djokovic. Con 1-0 y saque de Novak en el segundo set, y con ventaja de Kei Nishikori, una doble falta clamorosa del número uno cortó la sangría del japonés y firmó el 1-1 en esa segunda manga. Los aplausos atronaron el O2 Arena, como pidiendo una extensión de un partido que había durado... 23 minutos en el primer set. En ese set inicial, el tonante resto de Djokovic impidió que Nishikori ganara un solo punto con su segundo saque: 0/4, 0%.

La ovación sucedió a la doble falta... y sacó a relucir el lado oscuro de Djokovic. Y como el cuervo ya no puede ser más negro de lo que son sus alas, Novak conectó el modo 'clown' y aplaudió a la multitud con toda la sorna y sarcasmo posibles: y con la raqueta. Respondió un broncazo colosal: el Arena se sintió tan retado como el viejo Wembley Stadium en presencia de la vieja selección argentina de fútbol. Como a veces le pasa cuando Rafa Nadal pone a prueba sus límites de resistencia anímica, Djokovic se descompuso, Nishikori creció y anguló la pista con tiros planos... y el segundo set volcó hacia el Sol Naciente: 6-3 para Nishikori, el pequeño 'Maestro Sensei'... a quien el 'trainer' Clay Sniteman revisó, trató y vendó la muñeca derecha, con 4-3 en esa manga.

A partir de ahí, Novak Djokovic vio rojo. Desapareció el 'clown'. Y surgió el demonio insaciable que viene ganando este torneo sin fallo a partir de 2012. En 2014, Nishikori había ganado 21 de 23 sets decisivos. Pero en esta semifinal del O2 Arena... el noveno juego del segundo set fue el último que Nishikori ganó en Londres: en el crimen que fue el set final, el número uno abrió la espita de la presión e invadió la pista para cerrar en una estampida de seis juegos en fila, como el 'staccato' de seis disparos de una 'Walther'. Ese tercer set duró 28 minutos. Nishikori (25 errores no forzados) volvió a exhibir dolor en la muñeca, sin hablar del alma nipona, y se despidió con la sexta doble falta. A,l fin, 6-1, 3-6 y 6-0 para Djokovic, después de hora y 27 minutos de pasión. Djokovic firmó en la cámara de la ATP con un punto rojo que recordaba el Sol Naciente...

Nishikori acabó con un 18% de puntos ganados con segundos servicios (5/18). Ya en su cuarta final de la Masters Cup (no ha perdido ninguna de las tres anteriores, la primera fue en 2008, en Shanghai), Djokovic aguarda ahora a la final. No puede saberse si será el Djokovic 'clown' o el Djokovic más infernal. Sin el guerrero Nadal a la caza por la Península de Greenwich, quizá todo vaya a depender de ese infinito rugido del O2 Arena que despertó tantas tormentas y tantos sentimientos encontrados en Novak Djokovic...