Tsonga tumba también a Roger Federer para volver al Top-10

Jo Wilfried-Tsonga ha vuelto. Lo que está por ver es si será para quedarse y dar guerra. Lo hará si encadena semanas como la que culminó en el Masters 1.000 Toronto ganando en la final a Roger Federer por 7-5 y 7-6 (7/3). Como ese peso pesado que asombró en Australia 2008, sobre la pista rápida de Canadá, y después de llevar 14 meses sin conseguir una victoria sobre un top-ten, acabó tumbando a cuatro de una tacada: Djokovic, Murray, Dimitrov y al suizo para meterse otra vez (partía 15º) entre los diez mejores de la ATP.

El de Le Mans sumó su segundo Masters 1.000 a base de sacar bien (no entregó ni una oportunidad de break), mantener la concentración (perdió una bola de partido con 5-4) y aprovechar los numerosos errores no forzados (37 al final por 18 del francés) de un Federer que se desplazó mal y abusó del saque-red como receta.

Tsonga ganó así su segundo Masters 1.000, tras el de París-Bercy 2008, e impidió que el otoñal Federer, que sopló 33 velas el viernes, volviera a cazar una pieza grande que hubiera hecho la número 80 de su impresionante carrera. Con 29 años, Tsonga vuelve a pedir paso rompiendo la hegemonía del Big-Four. De los últimos 39 Masters 1.000, Nadal, Djokovic, Federer y Murray habían dominado 36. Ali Tsonga pega fuerte de nuevo.