Ahorra en la factura de la luz con estas bombillas halógenas regulables
Este tipo de iluminación de bajo consumo, que llega en un ‘pack’ de ocho unidades, resulta perfecta para colocarla en cualquier estancia de la casa
Plantas, jarrones, cuadros… La decoración del hogar depende de numerosos aspectos, aunque con frecuencia se suele olvidar uno que puede marcar la diferencia: la iluminación. Y es que la luz puede convertir una estancia algo desapacible en un lugar donde relajarse, estudiar, leer, etcétera. Por eso, conviene cuidar el tipo de claridad que se elige para cada una de las habitaciones de la casa. Y si lo que quieres es conseguir una mayor visión por la noche, la mejor opción pasaría por comprar unas bombillas halógenas.
Bombilla halógena
La bombilla halógena es un tipo de bombilla incandescente mejorada. Equipada con un filamento de tungsteno, su diferencia con respecto a la bombilla incandescente tradicional reside en que su lámpara es mucho más pequeña para la misma potencia y en que contiene gas halógeno, normalmente bromo o yodo.
Tipos de bombillas halógenas
Atendiendo al tipo de casquillo que utilicen, las bombillas halógenas se pueden clasificar en:
- R7s: la luz es amarilla e ideal para salones y habitaciones. Para que funcionen se necesita una corriente de 230 V y 240 V.
- GU5.3: semejante al modelo anterior, para que funcione es necesario un transformador de 12 V a 220 V.
- GU10: a elegir entre luz blanca o amarilla. El principal cambio se encuentra en que no requiere de un transformador. Funciona con corrientes de 220 V y 230 V.
- G9 y G4: su luz es amarillenta y resulta perfecta para sitios en los que se apaga y se enciende la luz repetidamente.
- E27 o E14: depende de la que se escoja, la luz puede ser blanca o amarilla. Su función es similar a la del anterior modelo.
Bombillas halógenas de bajo consumo
Con más de 1.800 valoraciones en Amazon, las bombillas halógenas de la marca Caldarax son unas de las favoritas de los clientes de esta web. Además, están disponibles en packs de ocho unidades con potencias de 10, 20, 35 y 50 W, y en dos tipos, GU5.3 y GU10, pero con distintos voltajes. Todas, eso sí, emiten una luz blanca cálida con una temperatura de 2.700 K.
Estas bombillas son capaces de ofrecer un ángulo de iluminación de hasta 36º y tienen 660 lúmenes de intensidad. Asimismo, son regulables y su reflector se puede ajustar de 0 a 100 sin parpadeos ni efectos estroboscópicos. Otro punto a favor es que su índice de reproducción cromática (CRI, por sus siglas en inglés) es de más de 80, lo que quiere decir que proporcionan un color más natural y vivo y que, además, restauran el color real de los objetos.
Concebidas para colocarlas como iluminación tanto directa como indirecta, estas bombillas se pueden utilizar en todo tipo de habitaciones: dormitorios, salones, cocinas, pasillos, etcétera. Y por si todo esto fuera poco, aseguran un promedio de 2.000 horas de vida útil, lo que reduce el problema del reemplazo frecuente.
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*Todos los precios incluidos en este artículo están actualizados a fecha 28-9-2024.