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LA MAGIA DEL TENIS

Los 6 momentos cruciales que vivirás en un partido de tenis

Aprende a gestionar la tensión y los nervios en las situaciones más delicadas de un encuentro y saca lo mejor de ti en una pista de tenis.

Los 6 momentos cruciales que vivirás en un partido de tenis

Cuando ponemos en práctica cualquier actividad, siempre sale mucho mejor cuando sabemos que un error no nos va a acarrear ningún perjuicio. Trasladado al mundo del tenis, no es lo mismo jugar un peloteo, que jugar un partido; de igual modo, en el transcurso de un encuentro, no es lo mismo jugar sin la presión del marcador que con ella.

Dado que una mala gestión de los momentos clave en una pista de tenis suele implicar una importante desventaja, es vital que sepamos identificar esas circunstancias y que mostremos ahí nuestra mejor versión. A continuación, vamos a ver cuáles son las situaciones en las que vamos a sentir una mayor presión en nuestra raqueta.

Arranque del encuentro

Los primeros compases de un partido suelen ser complicados, máxime si no conoces bien a tu rival. En los primeros puntos, la incertidumbre va a sembrar muchas dudas en tu juego y va a ser difícil que puedas desplegar tu mejor tenis. Ni tú ni tu oponente vais a querer empezar en situación de desventaja, porque, mentalmente, se puede hacer cuesta arriba arrancar con un panorama adverso. Por ese motivo, es bueno que planteemos algunos esquemas y estrategias básicas, fórmulas de concentración y planificación para abstraernos de esa tensión inicial y enfocarnos en golpear siempre de la mejor manera posible.

Cesión de tu servicio

Aquí ninguno somos Ivo Karlovic ni John Isner, pero, cuando alcanzamos un cierto nivel, lo normal es que ganemos los juegos con nuestro servicio y que nuestro rival haga lo propio. Sin embargo, tampoco debemos perder la calma ni el ánimo en caso de que encajemos un break, ya que a tu rival le va a resultar un poco más difícil ganar su siguiente juego al saque, por la presión que conlleva consolidar la ventaja. Además, también es muy probable que, después de la tensión acumulada y sabiéndose por encima en el marcador, tienda a relajarse o pierda la concentración y es ahí cuando debes aprovechar y emplearte al máximo para recuperar la rotura.

Consecución de un break

Se puede dar también el caso contrario y que seas tú el que le arrebates el servicio a tu oponente. Dada la circunstancia, debes centrarte especialmente en ese juego de consolidación; el hecho de adjudicártelo, va a generar bastantes dudas y desánimo en tu adversario. Por ello, tómate tu tiempo entre punto y punto, ten en cuenta la estrategia que mejor te ha funcionado y trata de orientar tus golpes hacia el lado más débil de tu rival.

Concatenación de errores

Ciertamente, es desesperante cuando no eres capaz de desarrollar tu juego y ves como fallas bolas una y otra vez; una sensación muy parecida a cuando tu rival no para de meter puntazos, uno detrás de otro. No obstante, lejos de desanimarnos o bajar los brazos, es el momento de respirar profundamente, relajarnos, detectar dónde está el problema y enfocarnos en lo que sabemos hacer. Trata de jugar cruzado, no arriesgues innecesariamente y ve recuperando la confianza a base de no fallar. Ataca las bolas cortas de tu rival y no te compliques la vida; no es momento de experimentar.

Final de un set apretado

A partir del 4-4, la tensión de un set comienza a aumentar exponencialmente; el margen de error se estrecha exponencialmente y, por tanto, los nervios pueden jugarnos una mala pasada. Si echamos un vistazo a tenistas profesionales, vamos a comprobar que ni ellos están exentos de ponerse nerviosos en este tramo del encuentro. Trata de no precipitarte y juega golpes profundos. Si tienes un revés cortado efectivo y fiable, puedes variar alturas si ves que a tu oponente le cuesta agacharse o no se desenvuelve bien cuando varías los efectos. Tampoco recurras a tiros paralelos salvo que sean absolutamente necesarios. Es muy importante que tu rival no tenga el control de los puntos, porque eso va a aumentar su confianza y va a desgastarte mental y físicamente.

Tie break

No revelo nada nuevo cuando digo que un tie break es el momento del set en el que más tensión hay en la pista. Llegar a un desempate quiere decir que tanto tú como tu rival habéis luchado con uñas y dientes durante doce juegos muy parejos y, bajo ningún concepto, queréis que todo vuestro esfuerzo quede en agua de borrajas. Aquí, cada punto cuenta, por lo que no puedes desconectar ni dejarte ir; encuentra el punto perfecto de equilibrio entre seguridad y contundencia, concéntrate y relaja el brazo. Si lo necesitas, tómate tu tiempo entre punto y punto y pon en práctica tu mejor repertorio de golpes. Empléate al máximo en cada segundo servicio que vayas a jugar, porque cada doble falta que cometas minará sobremanera tu confianza y tu concentración.