El mercado de la bicicleta resiste el ataque de la pandemia

Ya sabéis que no soy un gran fan de los materiales. Pero como sé que a vosotros os gusta, de vez en cuando también está bien que se hable de modelos, marcas y la situación del mercado en un contexto además muy especial. Y es que tras el comienzo de la pandemia, la bicicleta se ha afianzado como compañera de fatigas deportivas.

Primero, los que ya tenían bici se hicieron con rodillos para quemar ese invento del demonio llamado Zwift, con el que hubo competiciones donde se arrojaban unos números de vatios casi estratosféricos. Y desde que acabó el confinamiento severo y se volvió a permitir a la gente hacer deporte, no pocos se compraron bicicletas.

En esa situación floreció el mercado de segunda mano, y hoy tenemos más o menos una ‘foto’ de cómo ha evolucionado. La gente de la consultora Countop ha realizado un informe sobre la situación del mercado de la bici de segunda mano. Sobre una muestra de 3.000 bicicletas de carretera y MTB en varias plataformas han analizado marcas, precios y una serie de variables para ver cuáles son las tendencias en un mercado que, pese a las adversidades económicas, no ha dejado de crecer en los últimos meses.

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Por lo que se refiere a las marcas, Specialized es la que más aparece con un 8,1% de cuota, mientras que Orbea ocupa la segunda posición (6,9%), por delante de Giant (6,5%). Además de dar una pincelada sobre la concentración del mercado hasta el punto de que entre ocho marcas –sobre un total de 100 analizadas- copan más de la mitad del mercado: además de las tres mencionadas, Trek, Cannondale, BH, Scott y Merida. Lo que es, sin duda, una buena noticia porque seguimos viendo dos firmas españolas entre las de mayor aceptación de nuestro país.

Giant TCR y freno de zapata

El informe también detalla por modelos, con la Giant TCR –por cierto, la que tiene este que os escribe- como la más ofertada seguida de la Specialized Tarmac. El precio medio se sitúa en torno a los 1.500 euros, y otra cosa curiosa del informe es que el mapa de zonas de influencia es prácticamente calcado al mapa de España, con los principales círculos en Madrid y Barcelona y otros, ya algo más pequeños, en ciudades grandes como Valencia, Bilbao, Sevilla y Málaga. Quizá la excepción sea Zaragoza, que pese a ser la quinta ciudad del país por población no aparece como uno de los lugares con más oferta de bicis. Emergen, también, las Baleares como un destino con mucho movimiento para el nivel de población que representa.

Otra de las diferencias que queda patente entre las bicis de asfalto y las BTT es el uso de freno de disco. Ya se sabe que en el MTB, el disco está implantado desde hace tiempo y el informe lo corrobora, pues un 96% de las bicis analizadas lo lleva. Y luego tenemos, por el lado contrario, que en carretera sólo el 17% monta disco. Estará interesante ver, con el tiempo, si ese porcentaje aumenta o se mantiene estable. Sin duda, este tipo de frenado tiene mucho mercado por conquistar, pero me da que su avance no será tan rápido como se habría esperado hace tres o cuatro años.

También parece quedar claro que, por el momento, estas plataformas web –Wallapop, Milanuncios, Tuvalum y la ya desaparecida Bkie- son para vendedores particulares. Casi nueve de cada 10 de los que ofertaban bicis eran personas que lo hacían por su cuenta. En definitiva, un informe interesante y curioso para saber por dónde va el mercado ciclista. En este caso, el de segunda mano en un momento donde la bici parece ser uno de los sectores que mejor resiste las consecuencias de la pandemia.