Carv, el instructor virtual de esquí
El sensor conectado al móvil da instrucciones a tiempo real sobre técnica personalizada de esquí.
Desarrollado por dos estudiantes del Imperial College de Londres en el 2017, Carv son dos plantillas ultrafinas que se sitúan en las botas cuyos sensores procesan 35 métricas en cada giro. Estás son analizadas por la aplicación en el móvil, conectado a las plantillas vía bluetooh, y el entrenador virtual ofrece consejos a tiempo real en cada giro, cada vez que se sube en telesilla o en cada parada.
Según sus desarrolladores, la idea es convertir al convertir al esquiador en un esquiador mejor, no atiborrarle con un sinfín de datos en crudo que, en la mayoría de los casos, carecen de significado si no se saben analizar. El entrenador virtual, a través de los auriculares, va dando consejos como “Procure no poner las piernas en forma de A en los giros”, pero también desglosa los diferentes aspectos de la forma de esquiar del deportista como rendimiento en el equilibrio, bordes, rotación o presión sobre diagramas por colores muy intuitivos.
Según la forma y los errores en el esquí de cada usuario, Carv puede recomendar ejercicios para mejorar la técnica y mostrar cómo realizarlos con el fin de acelerar el perfeccionamiento. Los vídeos en donde se muestra como realizar los ejercicios y como ejecutar la técnica de esquí han sido producidos por la Professional Ski Instructores de América y Kaylin Richardson (dos veces olímpica de los EE. UU.). Por eso, esta aplicación está pensada tanto para el principiante como para el esquiador avanzado.
Carv también tiene su parte lúdica. Puede conectar a un grupo de amigos o familiares a través de la aplicación y desplegar un ranking sobre quién es el mejor esquiador según la técnica aplicada de cada uno.
La aplicación se puede descargar desde Apple Store y Google Play Store y los sensores Carv están disponibles por 299 Libras esterlinas.