Simeone sabe que su apuesta de esta temporada es Oblak
Acabó la primera vuelta y el Atlético va tercero y a cinco puntos del Barça y el Madrid. En cuanto a los goles y los puntos los datos son elocuentes. Son los peores datos del cholismo desde que se hizo cargo del equipo hace ocho años y ese habla de que su fútbol está aburriendo, pero Simeone está sacando el máximo provecho de los fichajes que le han traído el pasado verano y la conclusión es clara. Oblak sigue siendo de largo del valor más consolidado de los rojiblancos. Se mantiene en la lucha por ser el guardameta menos goleado con doce tantos y solamente el madridista Courtois ha conseguido igualar su marca y ante el Levante volvió a dejar claro de sus milagros para salvar la victoria. Va siendo hora de que los que otorgan premios como una serie opción de futuro para que le concedan un Balón de Oro. Tiene un nivel altísimo y por eso Gil Marín tiene claro que deberá renegociar un nuevo contrato y que se está mereciendo de largo ser el jugador que más gane en la plantilla. Sus actuaciones superan todo lo que se puede imaginar y ahora pensando en el futuro, una vez que el acuerdo con Cavani es total para la próximos dos años y a la espera de que si consiguen sacar a Lemar pueda incorporarse de manera inmediata, también es el momento para que el entrenador le pida a los directivos un cerebro en el centro del campo. Muchos currantes en esta línea, pero sigue faltando el que marque las diferencias. El que consiga explotar las virtudes de sus delanteros, en especial a Joao Félix y de esta manera se acaben con los problemas en el área rival que se han convertido en la penitencia del bloque, aunque con sus tres últimas victorias seguidas parece que ha recuperado la confianza y encima se espera que Koke vuelva de su lesión mejor que nadie y siga siendo el rey de las asistencias de gol.
A Joao Félix se le ve un poco alicaído y en especial ante el Levante desmoralizado porque no le salía nada de lo que intentó. Por eso no es extraño que hable de sus tiempos en el Benfica y empezando por sus propios compañeros, todo el vestuario, los técnicos y los directivos le van a arropar y también las gradas del Metropolitano. Saben que es la joya de la corona y lo que quieren por encima de todo es que sepan que nadie duda de sus virtudes y que tiene que salir en cada partido a dar lo mejor de sus virtudes y que nadie le va a reprochar nada. El propio Simeone el que más está hablando con el luso para que asuma que es la figura del partido. Incluso la emotiva despedida que tuvo Filipe Luis es el mejor modelo a seguir y para que sepa de todo corazón que nunca falla la gente colchonera. Ahora toca la cita de la Supercopa contra el Barça y la intención es salir a demostrar sus virtudes. Ganar el título sería lo secundario y lo que más interesa es demostrar en el campo ante sus rivales que este Atlético sigue siendo un suplicio para sus rivales y que por lo tanto no pueden bajar la guardia. Una ocasión de oro para ganar en autoestima y de esta manera lanzarse a por todas en la segunda vuelta. El que sigue siendo la gran alegría de la entidad es el filial. Concluyó como líder en su grupo de Segunda B y lo más importante es que siguen teniendo un grupo de chavales que prometen ser futbolistas más que importante para la primera plantilla.