Algunos libros de caza
Muchos de vosotros os encontraréis disfrutando de unas merecidas vacaciones. Quince o veinte días de asueto con la familia o con los amigos. Otros en cambio, ya habréis regresado, y el resto, seguimos aquí, soñando despiertos a base de darle buena cuenta al café.
Muchos de vosotros os encontraréis disfrutando de unas merecidas vacaciones. Quince o veinte días de asueto con la familia o con los amigos. Otros en cambio, ya habréis regresado, y el resto, seguimos aquí, soñando despiertos a base de darle buena cuenta al café.
Lo que es certero es que tendremos tiempo libre, aunque sea un poco, una buena opción sin duda, es elegir un buen libro de caza.
Escoger el libro de caza puede resultar o muy fácil o extremadamente complicado, por la cantidad de libros y autores a los que queremos leer. Pero esto al final es como con todos los libros generalmente. Pero para los cazadores puede haber unas pautas que nos ayude a decidirnos.
En primer lugar, nos tendremos que preguntar si lo que queremos es leer ese clásico que siempre hemos querido leer, y que es un tratado general de la caza o de un tipo de caza, o sobre una especie de caza.
En segundo, podemos optar por un libro de una temática concreta, ya que nos interesa contrastar las opiniones del autor con las nuestras y, por ejemplo, leer como practican la caza estos autores y ver que similitudes y diferencias tenemos con ellos.
En tercer lugar, a lo mejor lo que nos interesa es un libro narrado como una novela, basado o no en hechos reales, y que suelen tener siempre la caza como temática central. Misterio, intriga, intensidad, historias de amor, todos los ingredientes de los grandes éxitos, pero que giran en torno a la caza.
Y por último, tenemos los libros más técnicos, aquellos que nos describen calibres, municiones, manuales de recarga, descripción del comportamiento de especies de caza, como hacer planes técnicos, que visores usar en según qué cacería... En definitiva, aquellos libros que nos dan una formación extra sobre lo que nos interesa, cinegéticamente hablando.
Lo importante a la hora de escoger es plantearse por lo menos estas 4 variantes, y aunque haya o pueda haber muchas más, la elección siempre estará basada en nuestros gustos y apetencias como lectores. Puede parecer una tontería, pero nuestro tiempo es un tesoro incalculable y en vacaciones más, así que hay que sacarle partido y disfrutarlo al máximo.
Aquí van unas recomendaciones:
• Solitario. El autor, Jaime de Foxá, quiso dejarnos la mejor obra literaria, protagonizada por un jabalí perteneciente a la estirpe de otro más viejo y cachazudo, El Puñales, sabedor de muchos lances, escondrijos y aventuras en el monte, filósofo él cuando comienzan los andares del jovencito Solitario. Sus correrías, descritas con todo lujo de detalles con una atención muy cuidada hacia la toponimia serrana, son sencillamente deliciosas.
• Diario de un cazador, del Don Miguel Delibes. Obra magistral del maestro, donde narra la vida de Lorenzo. Este trabaja de bedel en una escuela, mantiene a su madre, tiene las ideas muy claras sobre muchas cosas y en los ratos libres, y todos los domingos durante la temporada, va de caza. Contempla el mundo con su lúcida inteligencia de muchacho de pueblo y se cuenta a sí mismo las cosas que pasan sin pensar en la posteridad. Su existencia, aunque estrecha y humilde, está tamizada por un optimismo beligerante y una clara conciencia de su dignidad. Frente a los sinsabores cotidianos está siempre la caza, que le llena el alma de gozo —desde la elección de los cartuchos al regreso con las piezas— incluso en los días de fiasco.
• El mundo de Juan Lobón, de Luis Berenguer es la supuesta autobiografía de un cazador furtivo que, en su lucha por sobrevivir y proteger a los suyos, se enfrenta a los terratenientes, a los caciques, a las autoridades e incluso a la mezquindad y envidia de su propia gente.
• Tras las huellas del gran jabalí, de Victor Expósito. La vida y la muerte, las alegrías y los peligros, las andanzas y las peripecias de un jabalí en los montes extremeños, en los altos de las sierras y en lo profundo de los barrancos. Una obra que nos introduce de lleno en las vivencias de un jabalí que sortea, con dispar fortuna, aguardos y esperas, monterías y batidas, para cumplir su destino, su enfrentamiento con El Milano.
• Entre Jaras y breñales, de Antonio Covarsí, es el postrer título que completa esta última edición de las obras de Antonio Covarsí Vicentell, tantas veces leídas y editadas, tanto en vida del autor, como después de su muerte.
• El Montero de Alpotreque, de Antonio Covarsí, el Montero de Alpotreque, fue, aparte de cazador singular, uno de los clásicos - si no el último - de nuestra literatura venatoria. Esta biografía, realizada por su hijo, da una visión completa y ordenada de su vida y hechos de caza.
• El Hormiguina, de José Luis Villares Gil. Historia rural en la que la caza cobra todo su sentido. Es la historia de un furtivo echado al monte en defensa de los suyos.
Por supuesto, hay muchísimos más, pero a buen seguro, estos son un buen entretenimiento para estos días de sol y calor que, a buen recaudo, nos llevaran a escuchar los susurros del campo.
¡Disfrutad!