La filosofía de Thomas debe ser la norma de conducta para el vestuario

Ya resulta cansino. Todos los días llegan noticias de fuera de nuestra Liga en la que se duda del futuro de nuestros jugadores para la próxima temporada. Ahora le toca a Rodrigo, que figura en la lista de objetivos del City y por eso hay que destacar la claridad del canterano Thomas cuando acabó el partido contra el Barça. Se le coloca en la agenda del Inter y no dudo a la hora de indicar que desea seguir en el Atlético. Encima ante los azulgranas fue uno de los que tuvo una actuación más que destacada. Una filosofía que se debe instalar en el vestuario y que por ejemplo quedaría estupendo que Griezmann también hiciese esta declaración de principios y de manera oficial. El sábado ante el Celta será el día del niño y lo que no le debe extrañar a nadie que se puedan escuchar pitos o que haya un profundo silencio desde la grada hacia la actuación del delantero galo. Lo que se le sigue pidiendo es que haya una demostración de respeto y cariño a sus actuales colores. En cambio el que ha podido firmar su finiquito en el club es Diego Costa con su expulsión. Aparte de un enfrentamiento con el árbitro que sobraba y que le puede provocar una sanción entre 4 y 8 partidos, sus números son más que evidente. Desde su vuelta al Atlético solamente ha jugado el 38 por ciento de sus partidos –las lesiones han sido su principal penitencia- y encima solamente ha conseguido cinco goles cuando en teoría debía ser el encargado de resolver el problema de la escasez ofensiva que ha venido arrastrando el conjunto durante la presente temporada. Se van a escuchar cualquier oferta que pueda llegar para su traspaso y la dirección deportiva ya le busca un recambio de primera fila como podía ser Icardi, Insigne, Jovic o Martens. La élite de goleadores de Europa ya que tanto Cerezo como Gil Marín quieren volver a ofrecerle un nuevo proyecto que le permita pelear por la Champions.

El que volvió a estar fantástico fue Oblak, bien apoyado en Giménez y Godín. El portero sigue dejando claro que es el valor más consolidado de los rojiblancos y se ha ganado a pulso la etiqueta de mejor del mundo. Supo parar a un pareja mágica, hasta que llegó Luis Suárez con su golazo que poco se puede hacer. Tampoco me olvido de que pese a jugar con uno menos, el Cholo ofreció su versión más valiente sacando a Correas y Morata e incluso en alguna acción a balón parado pudo provocar un disgusto a Stegen. Ahora a luchar por el segundo puesto que daría una plaza para jugar la SuperCopa de España y quedar por encima de los vecinos. Tampoco tuvo su día el filial que perdió en casa ante el Guijuelo en un partido que se daba como asequible para los tres puntos y seguir estando en la zona alta que permita el ascenso a Segunda y el próximo fin de semana una cita de vital importancia. El equipo femenino tiene el desplazamiento a Huelva, al que valoran como el partido más complicado que tienen y si lo ganan están convencidas de que al final ganarán la Liga y podrán aspirar al doblete. Una alegría que se necesita en la entidad para salvar una temporada que les la que ha causado más decepción en la andadura de Simeone.