Kalinic es la guinda que le faltaba a Simeone para ir a por la Champions

El croata junto a Diego Costa son la clave para el buen fútbol que les crearán Griezmann, Correa, Gelson y Lemar. Ante el Cagliari, Simeone volverá a dar más oportunidades a los canteranos. Contra el Inter será el examen definitivo pensando en la cita en Tallin contra el Madrid. 

Se acabó el misterio. Simeone ya tiene el delantero que venía pidiendo. Kalinic será la pareja de Diego Costa para culminar ante la portería rival al buen fútbol que se presume van a aportar tanto Griezmann como Correa, Gelson y Lemar. Es el gol que se necesitaba para seguir aspirando por la Champions que la próxima campaña se va a disputar en el Wanda Metropolitano. Una delantera que repasando su historia buscando sus mejores cifras goleadoras de su historial deportivo suman un total de 129 goles. Es decir, que saben moverse en los metros finales y acudiendo a lo alcanzado el año pasado es el Antoine el que tiene una cifra más importante con un total de 29. La idea que tiene Simeone es ser más ofensivo que ha sido durante su etapa en el Atlético y por eso ha buscado un centro del campo como Koke, Saúl y Rodri que saben irse hacia arriba con mucho peligro y dar máximo atención a las bandas que tienen que ser el principal argumento que exhiban en el fútbol estático. Además, Kalinic es de los que se dejan el alma en el campo y no admite bromas a la hora de ir a ganar. Por eso en el Mundial fue expulsado de Croacia ya que entendía que el seleccionador no estaba justo. Viene a cubrir la baja de un Gameiro que al final va a acabar en el Valencia y la otra salida será la de Vietto. Una vez más, Cerezo y Gil Marín no se han cortado a la hora de volcarse en el dinero necesario para darle al técnico los jugadores que ha pedido. El Cholismo se ha ganado el crédito para ser el auténtico jefe de los colchoneros y es que no se han reparado en gastos en un año diferente ya que todos los atléticos esperan que esa Champions –el único título que falta en las vitrinas- pueda llegar este año y con esta planificación deportiva estiman que ahora mismo pueden mirarle a cualquiera de las grandes potencias de Europa.

Otra vez la rumorología de la Premier y Courtois, colocaban al Chelsea detrás de Oblak, pero ahora mismo el Atlético está más que tranquilo que nunca. Primero, porque el propio interesado tiene lo deportivo por encima de lo económico y nunca se irá a una entidad que no va a jugar la Champions y encima los dirigentes han sido claros a la hora de indicarle de que van a subirle sus emolumentos para conseguir que la cláusula sea como mínimo de 200 millones y para recompensar su gran campaña que le han convertido en la pieza imprescindible para Simeone, ya que actualmente se le valora como el mejor guardameta del mundo y todos sus compañeros le consideran como de sus principales baluartes. Lo mismo pasa con Godín. Este año pasará a ser el gran capitán con la marcha de Gabi y con el apoyo de Koke, Saúl y Juanfran saben que su función no se limitará al campo. También en el vestuario deberá ser el que mantenga el nivel de competitividad y luego ser el encargado de hablar con la directiva para conseguir lo mejor para los jugadores. Una función fundamental, además pensando en el futuro, ya que se quiere que el uruguayo puede ser igual de importante para el Atlético cuando cuelgue las botas. Ante el Cagliari nuevamente los canteros será el centro de todas las referencias y el sábado ante el Inter será la reválida final pensando en la Supercopa de Europa contra el Madrid y por supuesto nada de pruebas y saldrán con el primer once de empaque de la pretemporada y se enseñará la apuesta de Simeone que en un principio tiene las ideas claras de ser más valiente y ofensivo desde la fortaleza defensiva que siempre han mostrado.