Vizcaíno dejará de ser ayudante de Simeone, aunque seguirá en el club

El silencio de Griezmann sigue condicionando la política de fichaje para no superar el límite salarial y el Athletic es el último escollo para el triplete de juveniles:

Mientras se sigue a la espera de conocer el futuro de Griezmann si parece que en el cuerpo técnico de Simeone se van a producir novedades. Mientras el Mono Burgos y el profe Ortega son intocables, con la llegada del argentino Nelson Vivas la primera baja será la de Vizcaíno. Seguirá formando parte del organigrama del club, pero sin tener que ver con el apartado de la primera plantilla, como ha pasado con el portugués Tiago. Incluso desde Málaga se apunta que hasta el equipo andaluz podría tener al director deportivo de los colchoneros en el punto de mira para la próxima campaña. Tampoco parece que en el Atlético le fuera a poner muchos problemas, ya que el italiano Berta se ha convertido en los últimos meses el encargado por parte del club de sondear el mercado tanto a nivel nacional e internacional. La integración es total y absoluta y nadie pone duda de que es uno de los culpables de los buenos resultados y la progresión tan evidente que ha demostrado la plantilla en los últimos tiempos. Tampoco Simeone quiere parecer que se muestra pasivo y por eso ha solicitado nuevas caras que le permitan afrontar la próxima campaña con las máximas opciones y sobre todo con un proyecto que sorprenda a los rivales para conseguir como mínimo llegar a la final de la Champions del Metropolitano. También ha gustado de manera evidente a los rojiblancos que al final Lopetegui se lleve a Rodri, el recambio para Gabi del año que viene, con la Roja para el Mundial de Rusia ya que entienden que va a adquirir una experiencia y sobre todo a aprender lo que es la alta competición y los objetivos de luchar por todo que tiene España.

Lo que ya comienza a cansar es la actitud de Griezmann y su entorno. No pueden subir más su oferta de 23 millones de euros limpios por temporada y el problema es que sigue condicionando la política de fichajes y no por las necesidades deportivas. También el Atlético se tiene que ajustar al límite salarial que le han impuesto en la LFP y debido a la política de subir los contratos de los futbolistas más destacados para tenerlos bien amarrados no pueden volver locos. Incluso siguen haciendo una lista de descartes para poder bajar el listón que tienen en cuanto a los emolumentos a la plantilla. Tras Rodri, les queda como mínimo dos nuevas altas y la realidad es que opciones ya las tiene el cuerpo técnico, pero que hasta el francés no se pronuncie no podrán lanzarse a los contactos que le permitan cerrar las operaciones. Igualmente habrá máximo apoyo para los juveniles que ante el Athletic se van a jugar la opción de poder luchar por la Copa del Rey y aspirar a un triplete que sería histórico. La realidad es que la cantera ha dado muchas alegrías y por ello el Atlético B va a ser cuidado al máximo en su planificación para intentar que puedan luchar por ascender a Segunda y que sería muy importante para el posterior salto de los más valiosos a la primera plantilla.