Una vez concluido el tiempo de caza, metiéndonos en la necesaria veda sobre muchas especies, no nos olvidemos de dar los cuidados necesarios a nuestros fieles compañeros de caza. De ello va a depender que esté en perfectas condiciones para la próxima temporada.

Ahora es un tiempo, aunque más inactivo para nuestros perros de caza, no menos importante. Debemos continuar con los cuidados fundamentales, prestando atención a la alimentación, sanidad y ejercicio de los perros. Son tres factores muy importantes de los que dependerá la calidad de su bienestar y su trabajo cuando llegue la nueva temporada de caza.

La alimentación del perro de caza debe ser equilibrada en relación a su tamaño. Lo más recomendable es proporcionarle un pienso de mantenimiento y de calidad, lo que le mantendrá musculado y en forma si a la vez realiza actividad física, cubriendo así sus necesidades energéticas. Si en jornadas de caza la cantidad de energía que toma es muy elevada, al pasar a un periodo más sedentario, principal cambio al que se ve sometido nuestro can, la proporción ahora debe ser menor.

Es momento también de acudir al veterinario para combatir enfermedades como la leptospirosis o tos de las perreras, con las vacunas pertinentes de recuerdo y las indicaciones del profesional. Así mismo, debemos tener muy en cuenta las desparasitaciones internas, tanto si viven en nuestro hogar como si no. Evitaremos con ello anemias, desnutrición, debilidad, y los parásitos que hacen que nuestros queridos perros enfermen.

Con estas lluvias que tanto bien están haciendo a nuestros campos (bendita agua), lo más probable es que sea una primavera con bastantes garrapatas. Al igual que son muy peligrosas para nosotros, también lo son para nuestro perro. Hay infinidad de productos para repelerlas que, a buen seguro, todos conocéis. ¡Mucho cuidado!

No debemos olvidarnos del entrenamiento del perro de caza. Un perro de caza tiene que entrenar día a día. Las razas de estos perros son, en general, muy activas, y necesitan a diario ejercicio físico. Son imparables, incansables, como nos demuestran en las jornadas de caza. Practicar ejercicio diario le ayudará a mantener una buena masa muscular y es fundamental para su corazón. Al final de la temporada, su forma física es espectacular y su sistema cardiovascular rinde al máximo. Esto es lo que debemos conseguir mantener en tiempo de veda.

Estos son solo unos consejos de esta humilde cazadora que siente un amor incondicional por los perros. Ahora debemos agradecerles todo lo que hacen por nosotros cuando salimos al campo, porque sin ellos no sería lo mismo. Y su salud, lo agradecerá.