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CORAZÓN ATLÉTICO

Luis Aragonés sigue siendo el alma y espíritu del Atlético

En el cuarto aniversario de su muerte sigue siendo el modelo a seguir para hacer grande a la entidad.

Luis Aragonés sigue siendo el alma y espíritu del Atlético

Recuperar a Filipe Luis tiene que ser una de las grandes prioridades. La apuesta de Koke y Saúl ante el Valencia es una buena opción. Habrá también dinero para fichar el verano o retener a los intocables. El gafe de Marcelino y el filial sigue lanzado buscando el ascenso:

Hace cuatro años los atléticos perdimos a nuestra referente, pero al que seguimos teniendo en nuestro corazón. Todavía en las gradas y durante los partidos en el Wanda Metropolitano el nombre de Luis Aragonés sigue siendo coreado en los momentos de mayor alegría, y también cuando el equipo se encuentra en una situación más que apurada. Debo de reconocer que personalmente ha sido un amigo único en los cuarenta años que llevo en el mundo del periodismo deportivo. Desde jugador, con aquella delantera mítica que formó Marcel Domingo con Ufarte, Gárate y Luis y que fueron los creadores del maravilloso contraataque rojiblanco, siguiendo con su cita con los banquillos en los que incluso nos devolvió a Primera del infierno a Segunda y sin olvidar su andadura de éxito con España al frente de la Seleccuón, la realidad es que Luis Aragonés sigue siendo inolvidable. Sigue siendo el alma y el espíritu del Atlético. El que nos indicó el camino a seguir para estar entre los grandes y que ha tenido en Simeone a su alumno más aventajado. Nunca ha fallado a los colchoneros y lo sabe muy bien su familia, en especial su hijo, que siempre se queda maravillado del reconocimiento que tiene su padre. Si como jugador fue de los que no se olvidan, en el banquillo se salió y sus charlas con su gente es algo que siempre seguirá presente en el mundo del fútbol, junto con su ambición. Siempre pensaba que eran los mejores y nunca bajaba los brazos antes de tiempo. Tampoco se cortaba a la hora de sacar los colores a los que mandaba si entendía que se estaba atropellando la razón. Las imposiciones no las aceptaba y procuraba siempre que el equipo fuera su mayor argumento. Incluso aportó una idea. La futura Ciudad Deportiva que quiere construir el Atlético se podría y se debería llamar Luis Aragonés para que los chavales supieran el espejo en el que se tendrían que mirar.

Mientras sigue los preparativos para la final ante el Valencia y sobre todo el gafe que nos persigue con Marcelino, al que llevamos ya más de tres años sin poder ganar a ninguno de sus equipos. De salida me gusta las pruebas que se están haciendo con Koke y Saúl como mediocentros. Es una asignatura pendientes del Cholismo esta campaña y seguro que van a generar el fútbol para sus delanteros que no se ha producido hasta el momento. El único pero volverá a ser las bandas y en especial que Filipe Luis que sigue siendo más que importante a la hora de atacar por la zona izquierda. Lucas lo intenta, pero está claro que le falta coronar los centros con la calidad que tiene el brasileño. El canterano sigue siendo el que mayor proyección tiene para ser el central que tome el relevo de Giménez que está como loco por buscar experiencia en el fútbol italiano. Koke quiere dejar claro que tiene sangre atlética y saldrá a tope de moral para demostrar que tiene todas las facultades para ejercer del nuevo cerebro rojiblanco. Acabó el mercado invernal y el Atlético ha traído a Diego Costa y Vitolo y la prueba de que habrá dinero este verano para afrontar los nombres que ha pedido el entrenador para ir a por la Champions. El que sigue lanzado es el filial, que ganó en Segovia el partido aplazado por la nieve y ya está a un punto de entrar en la zona de ascenso a segunda división. También en la cantera se está trabajando con mucho sentido.