Ha sido una noche inolvidable. Con el Larguero he tenido la ocasión de conocer el Wanda Metropolitano por dentro y lo tengo que reconocer: es el estadio que merecían todos los colchoneros. Sin duda alguna, y sin entrar en odiosas comparaciones, es de largo el mejor de Europa y ahora hay que tener paciencia para que el exterior se corresponda al fuste y el tronío que tiene el interior. Todo se ha pensado en la comodidad del público y ahora los espectadores no tendrá que vivir agobiados en sus asientos. Los últimos adelantados y algo que se me ha grabado en el corazón. Luis y Simeone serán con sus frases las últimas caras que verán los jugadores cuando salten el campo. Dos mitos que tenemos grabados en el corazón y hasta en la plantilla existe un interés especial en la inauguración ante el Málaga. Quieren que sea una canterano el que marque el primer gol y por lo tanto el objetivo es que Koke. Saúl, Thomas y Fernando Torres serán los que tengan el máximo respaldo para pasar a la historia de la entidad. La fiesta en el sábado será especial y lo cierto es que los problemas para llegar al nuevo campo por carretera van a quedar olvidados utilizando de manera mayoritaria el Metro como medio transporte y que cuenta con una estación espectacular. Incluso se espera que durante este mes la UEFA les conceda la organización de la final de la Champions del 2019 ya que no hay color con respecto a la teórica rival que es Baku y en cuanto se acaben los exteriores, la directiva colchonera va a solicitar a la Federación Española que sea la sede única para los partidos oficiales de España y para las finales de Copa y es algo que gusta bastante. Además la intención es que los exteriores se conviertan en una de las zonas de ocio más importantes de Madrid con lo que el éxito está más que garantizado.

Lo que está claro es que pese al gastos: 170 millones de gasto, el equipo sigue viviendo momento álgidos en todos los aspectos. El año se ha cerrado con superávit y con el Wanda Metropolitano se quiere llegar en breve a un presupuesto que ronda los 400 millones de euros y que les permita seguir luchando con los mejores. No quieren bajar el listón deportivo y que saben que ha sido fundamental para que la entidad haya dado un giro espectacular a su futuro. En el palco todo el mundo quiere estar en el partido contra el Málaga y con el apoyo que están teniendo por parte de todos los organismo se piensa que con mala suerte para diciembre los exteriores estarán concluidos, pero la intención es que en no más allá de un mes se cumpla con este trámite. Se trabajas 24 horas al día y cantidad de aficionados acuden para ver el avance de las mismas. El equipo también va a conocer el campo y hasta el nuevo hotel de concentración y el propio Saúl hablaba maravillas del nuevo estadio y estaba encantado con el terreno de juego. Aunque nadie va a impedir que el Calderón siga estando en el corazón atlético, la verdad es que entre los propios aficionados se tiene claro que el salto era necesario. Que ahora el equipo tiene las metas puestas en pelear con la élite y que por ello es fundamental tener un campo que les genere ingresos y sobre todo pelear para crear el miedo escénico que le convierta en un estadio temido para todos los rivales.