Euro Sub-21: análisis selección a selección (República Checa)
Dominó un grupo en el que estaba Bélgica y en los amistosos de preparación ha logrado resultados muy positivos, incluyendo victorias ante la anfitriona Polonia o la también participante y rival histórica Eslovaquia. Los checos han pasado años de zozobra en el fútbol base, pero parecen poco a poco recuperarse. Tras la decepción que supuso ser anfitrión en 2015 y no clasificarse ni siquiera para los JJ OO, los de Vitezslav Lavicka tienen la intención de sorprender a sus contrincantes en el grupo más duro de todos. En ese contexto se sabe manejar a la perfección el cuadro checo. Defensivamente fuerte y con gran rigor táctico, no hay conjunto que eluda los problemas a la hora de meterle mano en encuentros que por lo general suelen ser muy cerrados.
Un nombre propio destaca por encima del resto, el del delantero de la Sampdoria Patrick Schick. Su futuro parece ligado a la Juventus, con lo que eso supone para cualquiera futbolista de la Serie A. El centrocampista Barak y el atacante Jankto también saben lo que es debutar y hacerlo francamente bien con la absoluta de la República Checa. Otro que prometía mucho y de momento le está costando romper el cascarón es Cerny, del Ajax, al que en la federación checa le siguen teniendo en gran estima. Un once definido con un nueve de garantías. Con eso es suficiente para pensar en un conjunto competitivo.
Posible XI: Zima; Mateju, Luftner, Simic, Havel; Hubinek, Travnik, Barak; Cerny, Schick y Jankto.