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Maratón de Boston: gloria y tragedia

Este lunes se celebra la Maratón de Boston, que, para su desgracia, es conocida entre los poco aficionados por el horrible atentado que sufrió hace cuatro años. Pero Boston es mucho más que eso. Mañana estará dotada con 830.500 dólares en total, de los que los ganadores masculino y femenino se llevarán 150.000 cada uno. También hay 50.000 dólares si se hace la mejor marca mundial de la historia, aunque los récords no son homologados en Boston porque se corre con una diferencia de altitud de 139 metros entre la salida y la meta. También se otorgan 25.000 euros por batir el récord de la prueba.

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Aquí tenéis una aproximación a una carrera impresionante. 

Una maratón clásica sacudida por el horror, persecución de los asesinos, más muertes, un juicio al terrorista sobreviviente, que es declarado culpable de todos los cargos, pena de muerte. Y en eso aparece una religiosa católica, para ayudar a un asesino musulmán. Una religiosa que escribió un libro de éxito, obra que dio origen a una película dura y maravillosa, o maravillosamente dura. Una historia del deporte, de la condición humana, de la maratón, de la intransigencia religiosa, de atletismo, de la lucha por seguir adelante…  

La monja: Hellen Prejean, de las Hermanas de San José de la Medalla. De religión católica. Tiene 78 años y está considerada como una de las más importantes activistas por la derogación de la pena de muerte. Ha sido consejera espiritual de varios condenados a ser ejecutados. Fundó una asociación llamada Sobrevive, destinada a ayudar a víctimas de delitos violentos. Su libro Dead Man Walking (Hombre Muerto Caminando) dio origen a la película Pena de Muerte. Hellen Prejean asiste espiritualmente a Dzhokhar Tsarnaev. 

El terrorista vivo: Dzhokhar Tsarnaev, nacido hace 23 años en Kirguistán, de padre checheno y de madre ávara, una comunidad caucásica. Musulmán, cuya fe ha derivado paulatinamente hacia posiciones integristas y violentas. Sus progenitores pidieron asilo político en Estados Unidos. Les fue concedido y reagruparon a su familia. Causó una masacre en la Maratón de Boston y posteriormente fue detenido por la policía.

La Maratón: La prueba de Boston se celebra un lunes de abril, desde 1897, en el Día del Patriota. Nació a imagen y semejanza de la carrera olímpica de Atenas 1896. En 2013, dos bombas caseras colocadas en las cercanías de la línea de meta causaron la muerte de tres personas y heridas a 282, algunas con gravísimas amputaciones. El cerebro de la operación fue Tarmerlán Tsarnaev.

El terrorista muerto: Tarmerlán Tsarnaev, que tenía 27 años cuando ideó y ejecutó el atentado en Boston. Hermano mayor de Dzhokhar, sobre el que tenía una gran influencia psicológica, y al que condujo hacia el integrismo más agresivo. Tras el atentado huyó junto a su hermano, mató a un agente de seguridad y posteriormente fue abatido por la policía. Dzhokhar fue juzgado en la misma ciudad en la que cometió el atentado.

El juez: George A. O’Toole preside el Tribunal Federal de Boston. Dzhokhar fue declarado culpable de 30 cargos y condenado a la pena de muerte, vigente en el Estado de Massachusetts. El alegato de la fiscal fue contundente y demoledor.

Nadine Pellegrini: La fiscal. Calificó al acusado de “la peor pesadilla para Estados Unidos”, le definió como “imperturbable y sin remordimientos” y se preguntó: “¿Por qué la pena de muerte es apropiada para él?”, para responderse: “Porque tramó un complot para matar. Consideraba a la gente que estaba allí como sus enemigos. Creía en el terrorismo”. Reforzó su alegato con un vídeo amateur en el que se veía a gente derribada en el suelo con sangre alrededor y se podía escuchar el llanto desesperado de algunos niños. Hubo tres muertos y 282 heridos, bastantes de ellos con graves amputaciones.

Krystle M. Campbell: Gerente de un restaurante, de 29 años. Fallecida.

Lü Lingzi: Una mujer china de 23 años, estudiante en la Universidad de Boston. Fallecida.

Martin Richard: Un niño de ocho años. Fallecido. Como las anteriores víctimas mortales, estaba en la grada viendo llegar a los corredores. Su madre y su hermana de seis años sufrieron heridas.

Judy Clarke: La abogada defensora. Experta en juicios en los que se solicita la pena de muerte. Ante las claras evidencias de que su defendido era culpable, orientó su estrategia a librarle de la pena capital. Para ello argumentó que era dependiente psicológicamente de su hermano Tarmerlán, el fallecido.

De nuevo la monja: Ante el fracaso de su línea de defensa, Judy Clarke optó por tocar el corazón del Jurado y este lunes hizo declarar en el juicio a Hellen Prejean, que ha visitado al terrorista varias veces en la cárcel y que aseguró que Dzhokhar Tsarnaev “lamenta verdaderamente lo que hizo”. Una historia que se repite, porque la religiosa también defendió en 1980 a Robert Lee Willie, que, junto a su amigo Jesse Vaccaro violó a una joven de 18 años y posteriormente raptó a una pareja, violó a la chica de 16 y disparó al chico, que quedó paralítico. La religiosa también se relacionó con Patrick Sonnier, condenado a muerte en 1982 por el asesinato de dos adolescentes. No consiguió salvarle de la pena capital. Contó sus experiencias en el libro que fue inspiración de la película que en España se estrenó con el nombre de Pena de Muerte.

Tim Robbins: Director, guionista y productor de la película, estrenada en 1995. Un clásico del cine carcelario y jurídico, ganadora del Oso de Plata en Berlín, que también premió a Sean Penn, el actor que encarnó al asesino, y nominada a cuatro Oscars, de los que ganó uno.

Susan Sarandon: La mujer que dio vida a Hellen Prejean en Pena de Muerte. Hizo una interpretación fantástica que le valió el Oscar a la mejor actriz principal.

Otra vez la Maratón: Boston es una carrera clásica, la más antigua de celebración anual y una de las más prestigiosas de cuantas se celebran en el mundo, junto a Nueva York, París, Londres o Berlín. En 2014, doce meses después del atentado, corrieron miles de personas más que el año del atentado, desafiando al miedo en una ciudad blindada. Llegaron a la meta algunos heridos por las bombas de 2013, aclamados como héroes por el público. Fue una fiesta deportiva, un ejemplo de cómo se puede combatir el terror. Y la prueba continúa, impulsada por auténticos héroes.

Rebekah Gregory: Resultó herida aquel 15 de abril de 2013. Se ha sometido a 35 intervenciones quirúrgicas y ha perdido la pierna izquierda. Utiliza una prótesis a la que llama Felicia y permite a su hijo Noah, que también fue herido, que juegue con esa pierna artificial algunas veces. Felicia tiene las uñas pintadas de azul, haciendo juego con las del pie derecho, y con ella corrió Rebekah los últimos tres kilómetros y medio de la maratón bostoniana. Aunque a un precio terrible, esa heroína ha derrotado al terrorismo.