Mundial Sub-17: quinto título de Nigeria, fenómeno Osimhen y once ideal
Nigeria se proclamó campeón del mundo Sub-17 por quinta vez, segunda consecutiva. El tremendo poderío físico de un equipo que arrasó a todos los rivales que tuvo enfrente, salvo a Croacia en el último partido de la fase de grupos, fue decisivo para volver a conquistar el cetro mundial. Un jugador, Osimhen, destacó por encima del resto con diez goles en siete partidos. El delantero nigeriano resultó todo un fenómeno por su potencia y su facilidad para ver puerta, incluso en la final. Brasil y Argentina fueron las grandes decepciones, mientras que México y Bélgica, que cayeron en semifinales ante Nigeria y Mali, acabaron por ser las más agradables alegrías. Este es, a nuestro juicio, el once ideal del torneo:
Adrian Semper (portero, Croacia, 1998, Dinamo Zagreb)
El error tremendo del belga Teunckens en semifinales le hizo perder un reconocimiento que parecía suyo, pero que después de aquello es de justicia que pase a otro extraordinario guardameta, el croata Semper. Grandes partidos los suyos de la primera fase, especialmente ante Nigeria, y en los cruces. Alto, seguro y muy sobrio. Buen portero.
Diego Cortés (defensa, México, 1998, Chivas)
Su gol estratosférico ante Nigeria en las semifinales le define a la perfección. Un lateral derecho con clara vocación ofensiva, potente, siempre al servicio del equipo para subir la banda, fuerte con metros por delante pero también con calidad para driblar. Fue titular indiscutible y descubre un tipo de jugador que en México no se trabajaba mucho.
Wout Faes (defensa, Bélgica,1998, Anderlecht)
Su expulsión por protestar en el partido por el tercer y cuarto puesto no esconde un torneo extraordinario de este central con un futuro enorme por delante en el Anderlecht y en la selección belga. Por su físico tiene un gran parecido con David Luiz y a veces comete sus mismos errores de exceso de confianza. Muy completo, pese a ello.
Francisco Venegas (defensa, México, 1998, Pachuca)
Central zurdo de calidad técnica y muy buena salida de balón, junto a Esquivel conformó una estupenda pareja atrás en el atrevido conjunto mexicano. Por su forma de iniciar el juego recuerda a Rafa Márquez, aunque en zurdo, y además marcó tres goles en seis partidos, cifras nada desdeñables para tratarse de un central.
Alan Cervantes (centrocampista, México, 1998, Chivas)
Extraordinario mediocentro, siempre corrigiendo y sujetando el elenco de mediapuntas que fue el ataque de México, dio una verdadera lección táctica en casi todos los partidos, aportó carácter y manejó bien la pelota en una selección azteca muy vistosa. Maduro para su edad, no tardará en dar el salto a la máxima élite.
Kelechi Nwakali (centrocampista, Nigeria, 1998, Manchester City)
Hermano del Nwakali que hace dos años ganó este mismo torneo, el Manchester City tiene captados ya a ambos y no parece haberse equivocado. El hermano pequeño dio la sensación de orden, jerarquía y calidad suficientes como para llevar la manija y el peso de toda una campeona del mundo como Nigeria. Gran lanzamiento lejano, además.
Nikola Moro (centrocampista, Croacia, 1998, Dinamo Zagreb)
El Mundial confirmó el gran Europeo que había hecho y dejó claro que está ya listo para aparecer por el primer equipo del Dinamo de Zagreb, quizá este mismo año. Carácter, físico considerable y sobre todo una enorme calidad con el balón en los pies configuran a este nuevo talento del fútbol croata, un Boban en potencia.
Pablo Pérez (centrocampista, México, 1998, Pachuca)
El zurdo de México fue de los mejores jugadores de su equipo, sino el mejor, gracias a su habilidad para crear desde el sector izquierdo del equipo. No tiene perfil ni de extremo ni de volante puro, pero mezcla bien ambas cualidades hasta ser un jugador con llegada, desborde y gol. Fantástico jugador el de Pachuca, una zurda a vigilar muy de cerca.
Aly Malle (delantero, Mali, 1998, Black Star)
El zurdo de Mali fue, junto a Koita, el mejor jugador maliense en un ataque prodigioso del conjunto africano, que hizo mucho daño jugando de manera muy directa. Dentro de esa anarquía habitual de equipos como este el que más critero mostró y el que más calidad puso jugando por la banda fue Malle. No tardará en salir de Mali.
Victor Osihmen (delantero, Nigeria, 1998, Ultimate Strikers)
Diez goles en siete partidos, récord histórico en el torneo para este delantero nigeriano que esta en boca de todo el mundo después de un torneo extraordinario. Los equipos ingleses ya están dispuestos a hacer un fuerte desembolso por él. Es un delantero de zancada, buena movilidad y sobre todo un gran olfato goleador. La duda es saber si su físico le hace ser decisivo.
Josip Brekalo (delantero, Croacia, 1998, Dinamo de Zagreb)
Ni la eliminación de Croacia ante Mali en cuartos oculta el extraordinario campeonato de Brekalo, jugando siempre por la izquierda pero diestro, desbordando y desequilibrando con criterio y decisión, echándose muchas veces a la selección croata a las espaldas. Junto a Moro y Lovren fue el mejor de su selección y tiene un futuro de gran valor por delante.