Youth League: Barça campeón, gran Munir y once ideal del torneo
El Barcelona se proclamó campeón de la Youth League tras superar al Benfica en la final con goles de Rodrigo Tarín y Munir. El conjunto que dirige Vinyals alcanzó la gloria en la Champions juvenil que por primer año auspició la UEFA y que ha sido un éxito en todos los sentidos. Un innumerable caudal de jóvenes talentos es lo que deja la competición, que ha suplido perfectamente a lo que hasta el año pasado se denominaba NextGen Series y que simbolizaba exactamente lo mismo que ahora. El campeón hace dos años fue el Inter y el año pasado el Aston Villa. El tercero en ese escalón es, tras la final ganada en Nyon, el Barcelona. El torneo ha sido apasionante y deja algunos nombres que conviene apuntar. Este es, a nuestro juicio, el once ideal de la Youth League:
Fabrice Ondoa (portero, Barcelona, 1995, camerunés)
En la difícil misión de ser portero del Barça y tener que dominar muy bien la salida de balón, funcionó a un buen nivel aunque con algún pequeño fallo aislado. Se sacó de la manga un gran partido en la final, justo cuando más lo necesitaba su equipo, hasta ser decisivo con sus intervenciones. Todo reflejos.
Fran Rodríguez (lateral derecho, Real Madrid, 1995, español)
El varapalo que se llevó el Madrid en las semifinales ante el Benfica no debe empañar un gran torneo por parte de este fenomenal lateral derecho, ofensivo y físicamente poderoso. Destacó en casi todos los partidos de su equipo e incluso fue el encargado de lanzar algunas faltas.
Joao Nunes (central, Benfica, 1995, portugués)
Siempre bien colocado, capitán del Benfica, no muy rápido pero sí con calidad a la hora de sacar la pelota jugada y poderoso a balón parado. Titular indiscutible en todo el torneo, uno de los pilares sobre los que sustentó un gran equipo como fue el benfiquista.
Marvin Friedrich (central, Schalke 04, 1995, alemán)
Jugador fundamental en la gran revelación del torneo. Formó una estupenda pareja atrás junto a Starke-Hedlund y salió airoso de muchos partidos de altísima exigencia, por ejemplo el encuentro de cuartos ante el Chelsea. Poderoso, alto y muy seguro. Un central a tener muy en cuenta.
Xavier Quintillá (lateral izquierdo, Barcelona, 1996, español)
Cada vez se siente más comodo en esa posición de lateral izquierdo a la que pasó desde la de central. Físicamente está creciendo y mientras eso ocurre destaca en el lateral porque tiene mucha calidad para sacar la pelota desde atrás. Un chico de enorme proyección, un estupendo defensa.
Lewis Baker (mediocentro, Chelsea, 1995, inglés)
Acompañado de Loftus-Check en tareas más defensivas, se confirmó como un excelente mediocentro con gran llegada, personalidad y disparo desde lejos. Una pena la eliminación de su equipo en cuartos, porque tenía galones para ser una de las estrellas en la Final Four.
Marcos Llorente (centrocampista, Real Madrid, 1995, español)
El triste adiós del Madrid al torneo en semifinales tampoco desluce el enorme torneo que ha hecho el hijo del exjugador madridista Paco Llorente. Centrocampista con mucha calidad y capacidad para llevar el peso de los partidos, se consagró con un futbolista muy completo y de enorme proyección.
Rochinha (mediocentro, Benfica, 1995, portugués)
Exquisito con la pelota en los pies, hizo una semifinal apabullante frente al Real Madrid que coronó con un golazo de penalti a lo Panenka. Muchísima calidad en tres cuartos de campo, junto al también portugués Marcos Lopes, Rony, -del Manchester City- el más elegante del torneo.
Adama Traoré (delantero, Barcelona, 1996, español)
Nacido en L'Hospitalet pero de padres malienses, sus incorporaciones por la banda derecha son propias de un prodigio de la naturaleza. Habitual del Barça B en Segunda, el club le bajó para los partidos decisivos y la verdad es que no defraudó. Internacional Sub-19 con España.
Gonzalo Guedes (delantero, Benfica, 1996, portugués)
Extrordinario torneo, pese a estar apagado ante el Madrid en semifinales y no poder lograr el título en la final ante el Barça. Frente a los catalanes sí se intuyó algo su potencial, basado en un enorme talento y una capacidad muy alta de desequilibrar siempre partiendo desde la izquierda. Una joya.
Munir El Haddadi (delantero, Barcelona, 1995, español)
De origen marroquí pero nacido en el Escorial, fue el máximo goleador del torneo con 11 goles y seguramente también el mejor jugador. Zurdo, desequilibró todos los partidos que jugó incluido la final, en la que dejó para el recuerdo un gol desde el centro del campo al alcance de muy pocos.