Una imagen, una frase (semana 1)
Peyton Manning se convierte en una máquina de anotar imparable en ataque sin reunión y con receptores para todos los pases. Flacco da lo mismo con quién se reúna y los receptores que tenga, no es un quarterback que pueda sobrevivir sin carrera.
Los Saints están de vuelta. No tiene que ver con Brees, Graham o Colston, sino con un juego de carrera que hizo más en un partido que en toda la temporada pasada. Hacía mucho que en Nueva Orleans no veían 26 intentos de carrera de su backfield. Y eso que los Falcons hicieron un gran partido, pero dio la sensación de que aún no tienen muy claro cómo usar a Steven Jackson. Lo mejor, los tweets de Roody White tras el final: “sin no entreno en toda la semana no me alineéis en vuestro equipo”. “No puedo deciros si estoy sano antes de empezar el partido. Eso daría pistas al equipo contrario”. El mundo fantasy fagocita la NFL.
Belichick se enfadó y mandó a Ridley a la esquina con las orejas de burro por sus balones perdidos. Es verdad, el corredor fue un lastre durante toda la primera mitad, pero la enfermedad de los Patriots es mucho más compleja. Por primera vez en muchos años parecieron vulgares, un adjetivo del que no logran librarse los Bills.
Cutler y Brandon Marshall le ganaron la batalla aérea a Dalton y AJ Green, pero fue a los puntos y sin decisión unánime. La impresionante segunda mitad de Cutler pudo ser el pequeño detalle que desequilibró la balanza. Ahora tengo incluso más curiosidad por saber hasta dónde pueden llegar estos dos equipos.
Todos los años igual. Qué sí, que sí, que esta vez los Browns van a liarla. Y claro, tres intercepciones a Weeden para empezar y menos del 50% de completados. Pero en todas partes cuecen habas y Miami, pese a las facilidades, no lo tuvo claro hasta el final. De los ataques terrestres ni hablamos.
Los Lions siguen siendo un despelote, pero con Reggie Bush tienen tanta pegada que no pueden evitar ganar. También es cierto que contaron con la inestimable ayuda de un Ponder del que no parece fiarse ya ni el staff de Minnesota.
La línea ofensiva de los Steelers es un desastre y perdió para toda la temporada a Pouncey, así que ahora todos nos hacemos una pregunta que hasta hace poco hubiera parecido absurda: ¿Ganarán algún partido los Steelers? Pocas veces tendrán un rival tan blandito como los Titans.
Llevamos toda la pretemporada adjudicando el número uno del próximo draft a los Raiders, pero a mí no me parecieron tan malos. Eso sí, qué mal debe estar Flynn si tienen que jugar con Pryor. Aunque también es posible que la defensa y la línea ofensiva de los Colts sean tan malas que hagan buenos a los Raiders.
Los Jaguars ya han anunciado que Gabbert no jugará el próximo domingo por lesión. ¿No sería sencillo que dijeran la verdad? “Estamos hartos de él. Lo sentamos porque es un paquete”. Por su culpa nos quedamos con las ganas de ver a los Chiefs, que no necesitaron ni salir a jugar.
Todos sabíamos que los Jets son un equipo caótico, sin norte, ni líder, en el que cada uno va a su bola. Da lo mismo. Está asumido. Parece que les gusta. Lo que no sabíamos era que los Bucs también eran un equipo caótico, sin norte, ni líder, en el que cada uno va a su bola. Debe ser un virus contagioso.
El duelo de QBs corredores se convirtió en una batalla por pararles los pies. Wilson sobrevivió pasando y Newton no tuvo tanta suerte, pero después de tanta pizarra y tanta partida de ajedrez, todo se decidió con un fumble inoportuno de DeAngelo Williams que mató a los Panthers en el último suspiro.
Confirmado, los Packers ya saben cómo parar la 'option'. Confirmado, los Packers siguen sin saber cómo frenar a Kaepernick. Y menos ahora que tiene a Boldin.
Niners y Seahawks no podrán relajarse. La NFC Worts quizá tenga cuatro de los mejores equipos de toda la NFL. Vimos al mejor Bradford, al que llevábamos años esperando. Además, hay rumores de que Palmer le ha pedido matrimonio a Fitzgerald.
Me encanta ver a los Giants cagarla. Pocos equipos de cualquier deporte saben hacerlo con tanto arte. Eli en modo lelo, Wilson castigado sin jugar por sus fumbles, punts rebotados, ¡CAOS! Y mientras, Victor Cruz a su bola acumulando yardas y touchdowns. Dicho lo anterior, los Cowboys son un equipo muuuuuy serio.
Dicen las malas menguas que durante el segundo cuarto, mientras RGIII veía jugar al ataque de los Eagles desde la banda, alguien le escuchó murmurar: “Yo de mayor quiero ser como Vick”… Y que Shanahan suspiraba envidioso al ver como Chip Kelly le ha devuelto la frescura a Philadelphia en unas pocas semanas. Mientras tanto, el resto disfrutábamos del show McCoy, del ataque más emocionante de la jornada y de la casi remontada final de los Redskins.
Durante los dos primeros cuartos pensamos que Mike McCoy había conseguido resolver todos los problemas que heredó de Norv Turner. Más tarde descubrimos que siguen ahí, igual de dañinos que siempre. Solo ellos son capaces de desperdiciar una ventaja de 21 puntos jugando en casa. Al menos pueden decir que saben hacer una cosa mejor que cualquier otro equipo de la NFL: colapsarse.
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