Previas de wild card: Packers-Vikings
Mariano Tovar
El recuerdo está fresco y las sensaciones parecen difíciles de cambiar. Los Packers tendrán que lidiar con muchísimas yardas de Adrian Peterson, que contra ellos parece imparable, y contra una línea defensiva que no dejó respirar a Rodgers durante la semana pasada. Los Vikings estarán obligados a que el QB rival no caliente el brazo y a aliarse con la suerte. En el último choque jugaron un partido casi perfecto y, aun así, ganaron in extremis.
PACKERS
Creo que todo el año hemos infravalorado a los Packers. Siempre han acumulado infinidad de lesiones que han afectado, como una plaga, a todas sus líneas. Solo Rodgers se ha mantenido sin un rasguño. Y os digo una cosa, mientras Aaron se mantenga sano, todo lo demás tiene arreglo.
La línea ofensiva está parcheada y Rodgers se está salvando en muchas ocasiones por su movilidad. El grupo de receptores nunca ha conseguido estar al completo. Jordy Nelson y Greg Jennings, sus nombres clave, se han perdido partidos. Para el duelo contra Minnesota son cuestionables Nelson, Finley, Cobb y Boykin. Ahí es nada.
Porque su QB ha alcanzado una madurez fabulosa durante esta temporada. Se ha olvidado de los fuegos artificiales y se ha vuelto mucho más cerebral y práctico. Como un cirujano, sujeta el bisturí para hacer incisiones en el lugar exacto y en el mejor momento. Quizá hayan faltado las exhibiciones espectaculares, pero con todo el edificio sosteniéndose por los pelos, no había espacio para las florituras. Rodgers debe ser incluido entre los aspirantes al MVP porque ha demostrado que ya sabe manejar un ataque superando cualquier adversidad.
Así que los Packers, entre algodones todo el año, han sabido ir cerrando todos los agujeros con eficacia mientras iban creciendo como equipo. Algo muy parecido a lo que hicieron ellos mismos el año que conquistaron su último anillo, o los Giants en 2011. La duda es si todas sus estrellas jugarán al ciento por ciento durante el mes de enero. Muchas acaban de salir de la enfermería y los Vikings van a plantear su partido como una batalla campal.
Yo creo que los Packers no van a plantear el partido buscando frenar a Peterson, sino desconcertar a Ponder. A estas alturas tienen asumido que Peterson es imparable. En muchas jugadas conseguirán placarle para pérdida de yardas, pero en cualquier momento logrará sumar big plays para terminar con cifras estratosféricas. El corredor de los Vikings deberá cerrar el partido más cerca de las doscientas que de las cien yardas, y eso no parece discutible. Es más, si Peterson tiene una mala actuación, o se lesiona en los primeros compases, no habrá duelo, los locales se impondrán por paliza.
Así que los Packers intentarán minimizar daños y se centrarán en Ponder. Para hacer esta previa llamé antes por teléfono a Manolo Arana y le pregunté qué destacaría él del partido. Éste fue su análisis: “Mariano, la clave para la clasificación de los Vikings ha sido la lesión de Percy Harvin”. En un primer momento me desconcertó su comentario, pero luego lo entendí. Harvin fue, hasta su lesión en la jornada 13, el mejor todoterreno de la NFL. Corría, recibía y estaba en todas las jugadas de engaño… Ponder se sentía muy cómodo con él y soltaba el brazo con demasiada alegría. Desde su lesión, el QB no encuentra objetivos con la misma facilidad, y por eso está jugando más conservador, arriesgando mucho menos, por lo que también comete menos errores. Pese a ello, la semana pasada soltó varios pases a la virulé que terminaron en manos de sus receptores cuando podían haberse convertido en intercepciones con la misma facilidad.
La defensa tiene dos nombres propios: Pared Allen y Brian Robison. Los dos defensive ends causan estragos en las líneas rivales y se llevan tanta atención que facilitan mucho el trabajo del resto del front seven. Tampoco hay que olvidarse del temporadón que está haciendo Jasper Brinkley. El linebacker central ha sido infranqueable durante toda la temporada. Como suele ser habitual en los últimos años, la secundaria vuelve a ser la línea más débil del equipo. Y además llega al partido con varios jugadores tocados. Mientras el front seven mantenga a Rodgers ahogado no tendrán problemas, pero si el QB consigue tiempo para lanzar, los cornerbacks y los safeties de Minnesota pueden pasarlo muy mal.
Creo sinceramente que los Vikings han llegado hasta donde podían. Si tuvieran un QB que asegurara una mínima regularidad, y que fuera capaz de explotar todas las ventajas que proporciona Peterson, apostaría por ellos incluso como serios aspirantes al anillo, pero creo que Ponder antes o después la liará y, con ello, destruirá todas las posibilidades de su equipo.
También pienso que estos Packers son un grupo muy serio. Durante todo el año han sabido resolver sus problemas casi de inmediato y estoy seguro de que en seis días habrán dado con la fórmula para abrir la cerradura de unos Vikings que hace solo unas horas enseñaron todo lo que tenían y aún así ganaron con un fieldgoal en el último instante.
Pero claro, con Peterson en el campo nunca se sabe. Tiene el récord de yardas terrestres en un partido y con él nunca hay que descartar un milagro.
Pase lo que pase, este Packers-Vikings apetece. ¡Y mucho!
mtovarnfl@yahoo.es / twitter: @mtovarnfl