Manuel Arana
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ARANA
Semana de Halloween, aunque yo soy más de noche de difuntos. Y a eso voy.
Los Raiders encabezan mi lista de defunciones esta temporada. Palmer, la defensa y especialmente McFadden están siendo una gran decepción. Nunca habían tenido tan fácil alcanzar los palyoffs desde aquel lejano viaje a la Super Bowl y domingo a domingo van cavando una tumba lo suficientemente grande para enterrar todas las esperanzas que la Raider Nation había puesto en ellos durante el verano.
Los Eagles van detrás, Andy Reid se va a caer con todo el equipo por empeñarse en mantener a Michael Vick en el campo. Philadelphia tiene un muy buen equipo, pero las riendas han de cambiar, tanto en la banda como dentro del campo. Son como una banda de muertos vivientes.
San Diego ha perdido el alma en algún momento entre el final de la temporada pasada y el principio de ésta. Rivers es un desastre, Mathews no está encontrando los espacios para correr y Norv Turner en la banda parece vagar por el territorio de las almas errantes.
Y por supuesto los Saints. Los de Nueva Orleans parecen los tripulantes de un barco fantasma. Pues eso que dan mucho miedo, pero al fin y al cabo fantasmas. No quiere decir esto que no den un susto al más pintado, al fin y al cabo arrasaron los océanos de la NFL durante las últimas temporadas.
Y claro el Power Ranking:
1. Atlanta Falcons (7-0)
Matt Ryan sigue jugando al mejor nivel de su carrera. Es un claro aspirante al MVP. Los Falcons, además, tienen un calendario benévolo, salvo los Giants y los siempre peligrosos –por imprevisibles- Saints en dos ocasiones.
2. New York Giants (6-2)
Eli Manning está consolidándose entre mis preferidos. Es de los quarterbacks que no elude la responsabilidad de la victoria –al fin y al cabo los dos anillos deben quitar todos los miedos-. Su Halloween particular lo vivieron contra Dallas la semana pasada.
3. Houston Texans (6-1)
La solvente victoria frente a unos disminuidos –por las lesiones- Ravens, les ha repuesto de la derrota sufrida frente a los Packers. Es un gran equipo, pero tengo ganas de ver a Schaub en un partido comprometido. Sigo pensando que es recolector de yardas, pero no tiene ese plus de los quarterbacks que van a por los partidos.
4. Green Bay Packers (5-3)
Tres victorias consecutivas desde el varapalo contra Indianapolis. Rodgers está a un gran nivel de nuevo y la defensa comienza a rodar engranada. Mi único pero es el de los últimos años –aunque ganaran una Super Bowl hace dos años- no tienen un corredor que les desatasque.
5. Chicago Bears (6-1)
Se está demonizando a Jay Cutler, cuando tiene más oficio que la mayoría de los QB de la NFL. Especialmente más que los que juegan en la bahía. En defensa Jennings y Tillman son dominantes. Es un serio aspirante a todo.
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6. San Francisco (6-2)
Los 49ers sólo tienen un secreto, la combinación de una espectacular defensa contra la carrera con la presencia de Frank Gore en el lado ofensivo. Aunque Harbaugh se empeñe en intentar demostrar lo contrario, el MVP de este equipo no es Alex Smith.
7. Denver Broncos (4-3)
Peyton Manning es uno de los quarterbacks que menos sacks ha recibido esta temporada. La línea de ataque tiene mucho que ver. Como es tradicional en Denver no son enormes, pero su esquema de bloqueo los hace casi invulnerables.
8. New England Patriots (5-3)
Apalizaron a St. Louis bajo la lluvia de Londres. No tuvieron rival. Les queda un calendario complicado: Houston, San Francisco y dos veces Miami, que se está convirtiendo en la revelación de la temporada.
9. Baltimore Ravens (5-3)
Las lesiones de Lewis y Webb les van a matar. El partido frene a los emergentes Browns va a dar la auténtica medida de este equipo antes del doble enfrentamiento frente a los Steelers.
10. Pittsburgh Steelers (4-3)
Roethlisberger está jugando muy bien, realmente bien. Junto a Denver es el equipo a que no me gustaría enfrentarme en playoff. Lleguen con el récord que lleguen, a un único partido tienen el talento para ser los más peligrosos.
Y mis Vikings se caen por méritos propios. Peterson está jugando y corriendo como nunca, pero Ponder ha perdido la fluidez que le daba al equipo y la defensa ha pasado a ser la que más placajes hierra, cuando era un ejemplo de derribos en el primer contacto
