Good bye Roddick!
Tomás de Cos
La décima jornada del US Open nos ha dejado el adiós de un grande del tenis. Andy Roddick, que ya había anunciado tras la primera ronda que este sería su último torneo profesional, al no sentirse lo suficientemente competitivo, disputó su último encuentro en Flushing Meadows frente al argentino Del Potro: 6-7, 7-6, 6-2 y 6-4.
El bombardero de Nebraska, campeón en la edición de 2003 frente a nuestro Juan Carlos Ferrero, dio guerra hasta su último día como tenista. ‘A-Rod’ se despidió en una pista Arthur Ashe abarrotada y entregada, desbordada de emoción para homenajear al mejor tenista estadounidense desde Sampras y Agassi. Sus lágrimas y las de su mediática mujer, Brooklyn Decker, contagiaron al público ante el aplauso sincero de Del Potro [VÍDEO].
Tras felicitar a su rival por el triunfo y al juez de silla por su actuación, Roddick trató de controlar el llanto en la silla. Instantes después, volvió a al centro de la pista para agradecer el apoyo al público. "Por primera vez en mi carrera, no estoy seguro de qué decir. Oh, Dios mío, ¿por dónde empiezo? Desde que era un niño he venido a este torneo y me sentía afortunado de estar ahí sentado y ver a los campeones que han ido pasando”, dijo.
"Ha sido un largo camino, con muchas subidas y muchas bajadas, con un montón de grandes momentos. He apreciado vuestro apoyo a lo largo de ese camino. Desde luego, sé que no os lo he puesto fácil a veces, pero realmente lo aprecio y os quiero con todo mi corazón. Espero volver a este lugar algún día y veros de nuevo", prosiguió.
Para finalizar, Roddick tuvo unas palabras para sus más allegados. "Quiero dar las gracias a mi familia. A mi mamá y mi papá, que están aquí, que me dieron todas las oportunidades. Gracias. A mi equipo, que ha estado conmigo siempre. La razón por la que no tengo miedo a la jubilación es por la gente con la que me voy a casa. Son excelentes y se lo agradezco. Y una última reflexión. Me gustaría dar las gracias a alguien que no está más con nosotros: Ken Meyerson (su agente durante muchos años, fallecido en 2011). Te quiero. Gracias chicos".
Con la retirada de Roddick el tenis pierde a un tipo que ha dignificado su deporte con su actitud impecable y que ha dejado huella en él con su juego agresivo y un servicio descomunal. Es el segundo tenista de la historia, por detrás de Ivanisevic, con más saques directos (9.074 aces) y aún mantiene el tercer saque más rápido jamás servido (249 km/h). Unos argumentos con los que deja el tenis en el puesto 22 de la ATP, aún en forma, con un balance de 612 victorias, 213 derrotas, 32 títulos y más de 20 millones de dólares en premios.
Como el resto de los grandes tenistas de su generación (1980-82), Roddick ha vivido siempre a la sombra de Roger Federer, que le arrebató cuatro títulos de Grand Slam: el US Open de 2006 y los Wimbledon de 2004, 2005 y 2009. Pero ni Hewitt, ni Safin, ni Ferrero sufrieron en igual proporción la tiranía del suizo. (Por cierto, que Federer restó protagonismo al estadounidense hasta en su adiós, tras caer derrotado en cuartos frente a Berdych). Tampoco ninguno de ellos mantuvo su regularidad, con nueve temporadas consecutivas entre los 10 mejores del mundo (2002-2010) y 135 semanas en el top 3 (13+52+70). Good bye Mr Fair Play!