Previas de wild card: Broncos-Steelers
Como sois gente maliciosa, estáis esperando esta previa convencidos de que voy a sacar la espada de Democles y no voy a dejar títere con cabeza. Mejor dicho, Tebow con cabeza. Iba a deciros que os equivocáis, pero lo cierto es que estoy en el primer párrafo y no sé por dónde me van a llevar mis devaneos, así que todo es posible.
El panorama es desolador. Pero no solo en Denver, dónde dicen los rumores que están intentando levantar el ánimo a un Tebow en horas bajas. Según las últimas noticias, Big Ben está barajando muy seriamente la posibilidad de amputarse la pierna y salir a jugar con una de palo. Dicen que cree firmemente que con eso tendrá suficiente para merendarse a los Broncos.
Fuera de broma, los Steelers llegan con su quarterback titular muy tocado y con Mendenhall en el hospital para toda la postemporada. Esa es la clave del partido. No le deis más vueltas.
BRONCOS
La fiesta Tebow ha terminado. Lo que os contaba en el segundo párrafo es cierto. Lleva varios días usando dodotis y dicen las malas lenguas que le vieron disfrazado en el aeropuerto, intentando fugarse al lugar más lejano posible. A día de hoy, Tebow preferiría irse a hacer proselitismo en una tribu de caníbales que salir al Invesco Field a jugar al football americano. El guerrero indómito ha descubierto el miedo escénico y solo hace falta ver los dos últimos partidos para darse cuenta de que el jugador fresco y atrevido de las primeras actuaciones tiene el brazo más encogido que una estatua de mármol. Tebow está cagado.
Era muy bonito verle pasar despreocupado, subido a la ola buena y convencido de que era inmune a las balas. Pero llega un momento en que todo hombre empieza a sentir la carga de sacar adelante algo. Puede ser una familia, un negocio o cualquier otra cosa. En el caso de Tebow era un equipo de football americano con opciones para entrar en playoff. Y cuando el QB notó el peso de la responsabilidad ya no se divirtió tanto, empezó a lanzar intercepciones, a sufrir sacks y a notar cómo su público ya no le aclamaba tanto.
Dicho lo anterior, creo que el tema Tebow no tiene mucho más recorrido. No sé si recordáis a un QB que tuvo Miami y que se llamaba Ray Lucas. Era un especialista magnífico. Los Dolphins lo sacaban al campo en terceros downs cortos y en las últimas diez yardas. Corría con el balón con mucha habilidad y pasaba razonablemente bien, con lo que era indescifrable. Estaba asentado como segundo QB, la gente le quería, era popular y se lo pasaba bomba.
Pero un día a alguien se le ocurrió que podía ser el QB titular y destruyó su carrera en seis tristes partidos. Uno de ellos fue memorable: 13 completos de 33 intentos; 4 intercepciones, 1 sack y dos fumbles perdidos. Lucas nunca volvió a jugar en la NFL. Si hubiera seguido en su papel de segundo QB, que también mantuvo durante cuatro años con éxito en los Jets bajo la batuta del genio Parcells, su carrera no hubiera acabado con 30 años.
Tebow es esclavo de la option, y la option ya no da para más. Esto es football profesional y no escolar. Un ataque plano es desactivado en muy poco tiempo. Tebow no es reconvertible. Tarda un mundo en armar el brazo, no sabe leer defensas y anuncia el pase con su postura. Lanza tan desviado que es difícil interceptarle, pero cuanto más mejora, mejor apunta, así que le roban más la cartera. Suena a chiste pero es verdad. Tebow es más peligroso cuanto peores son sus lanzamientos.
Sus virtudes siguen siendo importantes. Es muy difícil placarle cuando ha arrancado a correr y es capaz de aguantar el balón en el pocket durante mucho tiempo. Sus pases más peligrosos llegan con la jugada rota, cuando todo el mundo corre de un lado para otro intentando desmarcarse sin tener en cuenta la ruta prevista. Tebow encuentra ahí muy bien los huecos (el mejor McNabb también era muy hábil en eso) y consigue muchas grandes jugadas. Sigo convencido que con un buen trabajo de formación, y sacándole al campo como especialista en jugadas concretas, Tebow puede ser un jugador muy provechoso. Saliendo al campo en cada snap es ya un pobre niño asustado, tirando de rabia y carácter, pero cada vez más consciente de sus limitaciones, porque no es tonto.
Un último detalle y termino con Tebow. Su mayor problema es la popularidad. Es muy complicado tener un jugador tan carismático en el banquillo y solo usarlo en jugadas específicas, cuando, además, lo normal es que tenga éxito en ellas. Si el público ve a un tipo que consigue primeros downs y touchdowns cada vez que sale al campo, hace sus cuentas y supone que será una máquina si juega todo el partido. La afición de Denver ha caído en esa trampa y ha arrastrado con ella al staff técnico, que se ha visto obligado a darle la titularidad. Creo que muy pocos equipos lo querrían tener en sus filas, para evitar que el problema les llegue a ellos.
Así que sospecho que, salvo que los Broncos ganen la Super Bowl, cosa que no harán, hay dos opciones. La primera es que Tebow sea cortado y se convierta en el James Dean de la NFL, desaparecido en la cima de su éxito. La segunda es que los Broncos fichen a un buen QB que ilusione a la afición y usen a Tebow para lo que sirve.
De hecho, ya se rumorea que Fox podría sacar a Quinn a la desesperada si el partido entra en un callejón sin salida.
Ya he escrito todo lo que tenía que decir sobre el ataque de Denver. Tebow se ha puesto, definitivamente, en manos de Dios, McGahee y Lance Ball intentarán funcionar en una option que ya no engaña a nadie mientras Royal y Decker ven pasar los balones por el cielo como si fueran aviones, ahí a lo lejos, con la esperanza de que alguno caiga por donde están ellos. Como me decía un hermano mío hoy en la comida, las opciones de los Broncos pasan porque su defensa consiga un safety y seque a los Steelers. Dos a cero y Zamora de portero, que decían en mi pueblo.
Porque la defensa de los Broncos sí que ha hecho una temporada extraordinaria. Dumervil y Von Miller están destruyendo a las líneas ofensivas rivales y machacando a los QBs. Champ Bailey, con su veteranía, está liderando a una secundara que ha mejorado una barbaridad desde que los rivales pasan muy apurados. Ahí están puestas todas las esperanzas de Denver. La línea ofensiva de Pittsburgh es un coladero, Big Ben está cojo y Redman será el corredor titular. Pero de este tema hablaremos en la parte dedicada a los Steelers.
STEELERS
En condiciones normales os diría que los señores de acero deberían arrollar a Denver, pero las condiciones serán excepcionales. Sé que la broma no os gusta a algunos, pero da la sensación de que en lo alto se han dado cuenta de que el profeta está afónico y han decidido dar una ayudita de otra manera. Big Ben está cojo. Muy cojo. Cojísimo. Las últimas noticias insisten en que además está empeorando. Como sabéis, yo creo que Ben pasa mucho mejor cuando tiene poca movilidad. En vez de bailar innecesariamente por el poket se centra en lo que tiene que hacer y lanza más rápido y con más precisión, pero una cosa es tener movilidad limitada y otra que sea nula.
Y más si enfrente hay un front seven que tiene la convicción de que la única posibilidad de ganar el partido pasa por maltratar al QB rival desde el primer minuto hasta el último… y delante hay una línea que se derrite y acumula penalizaciones cuando es muy presionada. Estamos en playoff y no me extrañaría que la recaída de Ben sea una falacia que busque el despiste, aunque si es cierta los Broncos tienen opciones.
El plan B es Charlie Batch y lo cierto es que cuando sale siempre cumple. El problema es que necesita apoyarse en el juego de carrera mucho más que Big Ben y esta vez no tendrá detrás a Mendenhall, sino a Isaac Redman. La vida es extraña y lo mismo el corredor llega y se marca un partido de 200 yardas, pero lo más probable es que se le caiga el mundo encima. Insisto, la línea de Pittsburgh es mejorable en todos los sentidos. Ni protege al QB si abre rutas francas al RB… y eso que el center es un tío tan bueno como Pouncey.
No hay que olvidar que los Steelers de los últimos años han roto una de sus tradiciones. Ya no son un conjunto enfocado a la carrera. Ahora abusan mucho del juego de pase. La apuesta tiene sentido. Big Ben es un killer y en el equipo cada vez ha habido mejores receptores. Muchos pensábamos que el despido de Santonio Holmes era un error gravísimo, pero Mike Wallace, Antonio Brown y el incombustible Hines Ward forman un grupo estratosférico. Fijaos, creo que ahora son, junto a Heath Miller, la mejor línea de los Steelers. Lo nunca visto.
Sobre la defensa de Pittsburgh no voy a hablar demasiado. Es LA DEFENSA con mayúsculas. Algunos analistas están criticando el rendimiento de algunas de sus estrellas este año y yo me quedo boquiabierto cuando lo leo. Además, si algo está claro es que los Steelers no juegan en serio hasta que llegan los playoff, así que no tengo ninguna duda de que rendirán al máximo nivel. Es de risa. Miro al once titular para intentar destacar a alguien y me gustan todos. Pienso en que estamos en enero y aún me gustan más. Y que no os engañen. Defienden la carrera como los ángeles. Y la option con una mano atada.
MI PRONÓSTICO: STEELERS +7
Os confieso que después de escribir esta previa me hubiera gustado cambiar el pronóstico y poner Steelers +0. La sugestión me lleva incluso a pensar que el partido terminará empate a cero y se resolverá después de escientasmil prórrogas el miércoles por la tarde. Me parece que las defensas son tan superiores a los ataque que la idea de un 2-0, victoria por un safety, no me parece tan descabellada. Pero esto es football y luego Tebow recuperará el favor divino, Big Ben se quitará la escayola para demostrar que su tobillo está incorrupto y el partido se convertirá en una fiesta de locos.
Los Steelers son mucho mejores, pero las circunstancias han provocado que el partido se iguale. Si los Broncos consiguen llegar al final con el marcador igualado sí creo que Tebow puede armar la parda. Entonces volverán las fanfarrias, la locura y las confesiones en masa… y si los Texans no fallan, Bill Belichick tendrá un orgasmo múltiple después de muchos años.
Y yo me sentaré frente a la televisión expectante. Quizá contemple un milagro.
mtovarnfl@yahoo.es / twitter: @mtovarnfl