A vueltas con el salary cap
Cada vez somos menos originales. Desde hace un par de días los medios especializados abren sus páginas con ‘Are you ready for some football?’ o similares. Los tiempos se están cumpliendo a rajatabla pero seguimos sin saber cómo se ha solucionado el asunto del límite salarial (salary cap) para esta temporada.
La tabla que publiqué ayer es la que aparece como oficial en todas las grandes webs. Si en alguna parte veis cifras distintas es posible que hayan añadido una previsión de sueldos para las elecciones del draft. La reproduzco de nuevo para los más despistados.
Tabla de salarios en 2011
Dallas Cowboys 136.6
Green Bay Packers 129.8
New York Jets 128.5
New York Giants 126.3
Denver Broncos 125
Houston Texans 118.4
Pittsburgh Steelers 116
Indianapolis Colts 115.5
Washington Redskins 115.2
Detroit Lions 113.8
Minnesota Vikings 108.4
Tennessee Titans 107.4
New Orleans Sanits 105.2
Chicago Bears 104.9
Miami Dolphins 103.1
St. Louis Rams 102.4
New England Patriots 102.3
Atlanta Falcons 102.1
Baltimore Ravens 101.3
San Francisco 49ers 100.9
Cleveland Browns 99.2
Buffalo Bills 96.4
Cincinnati Bengals 90.7
Oakland Raiders 85.8
San Diego Chargers 85.8
Arizona Cardinals 83
Seattle Seahawks 81.1
Philadelphia Eagles 80.8
Jacksonville Jaguars 78.1
Kansas City Chiefs 74.7
Carolina Panthers 73
Tampa Bay Buccaneers 59.7
Aún no hay una cifra oficial para el límite salarial en esta temporada. Los primeros rumores apuntaban a que rondaría los 130 millones (se hablaba en concreto de 128). También se dijo que esta temporada podría quedar exenta, pero John Clayton, prestigioso periodista de ESPN al que todos leeréis porque sus artículos son traducidos para la sección de castellano, publicó que habría límite y que estaría entre los 120 y los 121 millones. Todo el mundo se hizo eco dando la cifra como buena. Otros medios incluso rebajan la cifra a 115. Por ahora nos movemos en una horquilla de entre 115 y 130, con los 120 de Clayton como cantidad más fiable.
El año pasado no hubo límite salarial. Fue una de las consecuencias de la no renovación del convenio entre propietarios y jugadores. La NFL advirtió a los equipos de que era una situación provisional y que no era conveniente lanzarse a fichar a lo loco. Lo hizo antes del inicio de la agencia libre y la política de la mayoría fue mantener sus criterios contractuales como si hubiera límite salarial. Otros, como los Jets, vieron la ocasión ideal para firmar contratos de corta duración e intentar hacer un super equipo que ganara el anillo y se disolviera inmediatamente. Algunos, como los Packers o los Cowboys, aprovecharon para mejorar significativamente los contratos de sus estrellas. Si tenéis curiosidad por saber lo que gana cada jugador de la NFL, podéis consultarlo en la siguiente dirección: http://www.sportscity.com/NFL-Salaries/ Guardad esa web en favoritos que tiene cosas muy interesantes.
El problema es que, con el nuevo reparto de ingresos entre propietarios y jugadores, el límite salarial de este año puede ser sensiblemente inferior al de 2009 (127 millones de dólares), último año en que hubo cap. Eso puede dejar a muchos equipos literalmente con el culo al aire. Yo ya he apostado en otros artículos por una solución que beneficia a las dos partes, propietarios y jugadores, que consiste en no poner límite obligatorio en 2011, para que los equipos tengan un año para reajustar sus finanzas y los jugadores no sufran en sus carnes el inevitable recorte de sueldos. El problema es que la NFL avisó hace un año de que este problema se podía producir y recomendó a los equipos que fueran precavidos en sus operaciones. Por otro lado, más o menos la mitad de las franquicias llegan con los deberes hechos y recordarán a los más derrochadores el cuento de la cigarra y la hormiga.
Como os he dicho, el equipo en peor situación son los Cowboys, con 136,6 millones de dólares en salarios. Gran parte del problema radica en el estratosférico contrato que le hicieron a Miles Austin. Los Cowboys tendrán que resolver el entuerto de tres maneras: no gastando ni un duro en la agencia libre, vendiendo algún jugador con contrato alto (Marion Barber puede tener las horas contadas), y reestructurando a la baja los sueldos de algunas de sus estrellas. Lo único seguro es que en la gerencia de ese equipo, y de algunos otros, deberán cuadrar el círculo.
Es muy curioso cómo los analistas están reenfocando la mirilla del mercado de jugadores para ajustarla a las posibilidades reales de cada uno para fichar. Como os llevo diciendo desde hace varios meses, la agencia libre va a ser frenética, apasionante y se pueden voltear los power rankings casi cada día. El orden de valores puede cambiar radicalmente respecto a los últimos años. Cuantas más vueltas le doy, más convencido estoy de que si los Chargers no aprovechan el río revuelto que saldrá de todo esto para ganar la Super Bowl, no lo harán nunca. Los Bolts parten en mejores condiciones que nadie por plantilla (que es magnífica), por draft (que fue magnífico) y por agencia libre (en la que se pueden llevarse lo que quieran).
En resumen, montonera y lío en el bazar. A veces es difícil seguir la NFL sin perderse.