Hablemos sobre quarterbacks - (2ª parte: Kolb y Orton)
No sabía que Matt Ryan tuviera tantos admiradores. También esperaba que alguno me echarais en cara que Ryan estaba por encima de Rivers (lo que ofendió a algunos), en el ranking de QBs jóvenes que hice hace tiempo, y ahora no he seguido el mismo criterio. Más adelante, no hoy, explicaré los motivos por los que no señalé como estrella a uno de mis jugadores favoritos. Hoy toca hablar de otra cosa.
Kolb y Orton. Orton y Kolb. Quizá los jugadores más deseados del momento. Si fueran agentes libres no hay ninguna duda de que uno de ellos firmaría el gran contrato de esta offseason (a partir de ahora, en estos artículos, hablaré como si ya fuera segura la temporada 2011). A ambos les queda un año de contrato por lo que podrían entrar en un trade muy beneficioso para sus equipos… si quisieran desprenderse de ellos.
Ni Eagles ni Broncos tienen ninguna gana de dejarles marchar. Es fácil de explicar y todos entendéis las razones, pero por si queda algún despistado, os las recordaré.
Los Eagles tienen a Vick que es una gran estrella. Eso es indudable. Y más después de si magnífica temporada. Ya he hablado bastante sobre él en diversos artículos y sabéis de sobra mi opinión. La cuestión es que sospecho que en Filadelfia hay bastante gente que piensa sobre Vick exactamente lo mismo que yo. Tiene 30 años, así que aún es joven, pero por su forma de jugar tiene facilidad para lesionarse. Su gran arma es la movilidad y nadie sabe cuantos años la puede conservar. A pesar de su mejoría en el pase, no parece que pueda reconvertirse en un pocket passer como le sucedió a Randall Cunningham. Por último, Vick no hace que mejore el resto del equipo, sino que asume demasiado peso en el ataque e incluso llega a anular a sus compañeros en algunas ocasiones.
Lo bueno de Vick es que es puro espectáculo. La afición de los Eagles está claramente dividida. Algunos piensan que la plantilla tiene mucha calidad y que solo hay que mejorar algunos detalles, sobre todo en defensa, para que Vick lleve al equipo a la Super Bowl. Además, los ‘pro Vick’ se relamen de gusto solo de pensar que el QB pueda repetir actuaciones como la de Washington. Y no tengáis duda de que las repetirá. Otros creen que Vick puede ser pan para hoy y hambre para mañana, que los equipos poderosos le tienen cogida la medida, que muy difícilmente podrá ganar un anillo y que su forma de jugar es muy poco compatible con la west coast de Andy Reid.
En realidad todos tienen razón.
El papelón es para el staff técnico de los Eagles. Vick es la elección más obvia, pero una lesión inoportuna puede destruir el proyecto. Y no olvidéis que Vick ha sufrido lesiones que le han hecho perderse partidos casi en cada temporada. Kevin Kolb es su teórico QB de futuro desde hace cuatro años y, además, ha tenido actuaciones magníficas. En 2009 jugó un partido casi perfecto contra los Chiefs y en 2010 estuvo a punto de inclinar la balanza a su favor tras los partidazos consecutivos ante 49ers y Falcons. El problema de Kolb es que sigue siendo una incógnita. Solo ha jugado siete partidos como titular en su carrera. Tres muy buenos, pero otros tres horribles.
Kolb por otro lado, es un pocket passer clásico. Aparentemente hace buenas lecturas, tiene buen brazo y es valiente. Parece algo frágil de moral, pero su carrera no está siendo fácil. Si cada snap se convierte en un examen, y eres permanentemente cuestionado, el ánimo se resiente. Fijaos en algunos de los más grandes. Brady jugó un par de años muy protegido por un esquema de juego conservador, a Peyton Manning le dejaron lanzar ¡28 intercepciones! sin cuestionarle en el año de su debut, Big Ben pasó lo mínimo indispensable en sus primeras dos temporadas.
Creo que Kolb ha asumido que en Filadelfia siempre será cuestionado. En teoría es el QB ideal para la west coast de Reid, pero siempre le compararán con McNabb y con Vick. En Filadelfia llevan muchos años con QBs estelares y hay que ser muy bueno para sobreponerse a esa presión.
Supongo que los Eagles intentarán convencerle en los próximos meses de que firme una ampliación de contrato. Si el jugador no lo acepta estarán obligados a buscar un trade, porque dentro de un año será agente libre y no sacarán nada por él. Aparentemente, los Cardinals son los más interesados en pujar, aunque también se habla de Vikings, Dolphins y Titans. Los 49ers parecen más enfocados en conseguir a Orton, pero en caso de que falle el plan A, seguro que entrarán en la pelea. Los Eagles tendrían asegurada una segunda ronda alta por él (como mínimo), pero exigirán una primera.
El caso de Orton es más peliagudo. En Denver están desbocados. Un equipo tradicionalmente conservador, entendido y poco aficionado a lo histriónico ha caído en manos de la ola Tebow. Como esos jóvenes estudiosos y obedientes que, de repente y de forma inexplicable, entran en una etapa hippie en la que lo abandonan todo y se lanzan al amor libre. La afición de Denver piensa en Tebow, se compra pijamas de Tebow y duerme con Tebow… mientras tiene sueños húmedos con Tebow. La directiva, con Elway como nuevo foco de atención, no tiene muy claro como puede acabar el invento, así que quiere protegerse las espaldas con Orton.
El fichaje de Fox es otro punto a favor de Orton. A mí no me gusta Fox, lo sabéis de sobra. Durante toda su etapa en Carolina ha tenido un backfield brutal que, en mi opinión, ha despreciado e infrautilizado para darle el balón a Delhomme. Pero mucha gente que sabe mucho más de esto que yo, considera a Fox un gran entrenador, un tipo muy serio y muy capaz de resucitar a los Broncos. Doctores tiene la Iglesia. Digo que Fox es bueno para Orton porque, si no cambia la tendencia, seguirá siendo un entrenador que priorizará el juego aéreo. En una segunda lectura podríamos pensar que McDaniels también priorizó el juego aéreo pero, curiosamente, Orton tuvo más éxito cuando se vio apoyado por la carrera. Además, Fox es muy conservador y siempre preferirá un QB de garantías como Orton sobre un verso suelto indomable como Tebow. Creo que Fox sufre taquicardias cada vez que piensa en el ex de los Gators.
Se que muchos infravaloráis a Orton y pensáis que yo le sobrevaloro. Os confieso que me hubiera gustado vivir en una realidad alternativa en la que el QB titular de los Bears de este año, con Martz como coordinador ofensivo, fuera Orton. Siempre me ha parecido un QB muy bueno, infravalorado, pero creo que McDaniels le ha convertido en un jugador mucho mejor. Orton es muy serio, obediente, responsable y trabajador. El novio que todos los padres querrían para sus hijas. Pero además tiene brazo, puede ser brillante y ha demostrado que sabe cargar con todo el peso de un ataque. Ya es un veterano, curtido en mil batallas, a los 28 años. Tiene un gran problema que, como le sucede a Kolb, tiene su origen en haber sido siempre cuestionado. Se le arruga el brazo en la zona roja y en los terceros downs. Orton tiene miedo a fallar y, demasiadas veces, lanza pases inalcanzables por miedo a ser interceptado o a provocar un big play defensivo que le deje en evidencia.
Esa carencia estaba corrigiéndose poco a poco pero volvió pocas semanas antes del despido de McDaniels. Creo que su suplencia en los últimos tres partidos de la pasada temporada, camuflada por una presunta lesión, le ha hecho mucho daño y le ha dejado sin ganas de seguir en Denver. Sabe que Tebow se ha ganado el corazón de la afición y que él es un plato de segunda mesa.
Pero claro, en Denver saben que Tebow es una apuesta muy arriesgada y quieren conservar a Orton a toda costa. Le están prometiendo a Orton la titularidad pero el QB ya ha pasado antes por eso y sabe que no es verdad. Fox ya ha demostrado que si las cosas no le funcionan es capaz de vender a su madre. Como les sucede a los Eagles con Kolb, los Broncos saben que tienen muy poco tiempo para conseguir convencerle de que firme un contrato de larga duración. Dentro de un año será agente libre y lo perderán sin recibir nada a cambio.
En este caso, casi todos los analistas creen que los Broncos podrían conseguir una segunda ronda por él. Todo el mundo sabe que los más interesados son los 49ers, que no dejan de decir que es el QB con el que sueñan. Desde el entrenador a los líderes del vestuario de San Francisco se repite una y otra vez el mensaje. También hay que decir que, en los últimos días, Harbaugh está lanzando flores a Alex Smith, así que quizá algo se haya podido torcer. También se habla de que Arizona, Miami y Seattle pujarían por el QB.
Si yo fuera Orton no lo dudaría. Pelearía hasta la muerte por viajar a la bahía. Es un QB perfecto para una West Coast, los 49ers tienen el equipo casi hecho y solo necesitaban un entrenador con criterio y un buen QB para convertirse en auténticos aspirantes. Jim Harbaugh ha devuelto a ilusión a los Niners. Tienen un grupo de receptores poderoso y un gran backfield y triunfar en San Francisco te aupa, inmediatamente, a la élite de la NFL.
Creo que tanto Kolb como Orton tienen mucho que perder si no cambian de aires y bastante más que ganar si consiguen un trade. Apuesto por que ambos se moverán y provocarán el gran efecto dominó de esta offseason.
Pero esto no acaba aquí. En la 3ª parte, que ya escribiré la próxima semana, hablaremos de otros QBs que también pueden convulsionar el mercado.
Ya se que no tiene nada que ver con el tema, pero mientras buscaba las fotos volvía a pensarlo. ¿Cómo es posible que el uniforme de los Broncos sea tan bonito?
mtovarnfl@yahoo.es