El power ranking (top 5) tras la semana 13
Es divertido cómo se ha desatado la ilusión en Atlanta. Comienzan a soñar con ver los Falcons en la Super Bowl después de doce años, sin su estandarte de la última década.
Michael Vick llevó al equipo a una final de conferencia contra los Eagles, pero nunca fue capaz de establecer un juego sólido para los de Georgia.
Curiosamente esta temporada se ha hecho con la titularidad de los de Filadelfia, tras la salida de Donovan McNabb. Vick ha dotado de otra dimensión al equipo de la ciudad de la Campana de la Libertad. Cuando todos esperábamos que Kevin Kolb se asentará como el eje central del ataque de los Eagles, Vick ha demolido los esquemas de todos los analistas y ha despertado las simpatías de los aficionados, a pesar de sus consabidos problemas con la justicia.
McNabb se marchó a Washington, a las órdenes de Mike Shanahan, donde ha fracasado -una vez más-. Entiendo que el juego de carrera ha desaparecido en los Redskins y que el juego aéreo tampoco es nada del otro mundo, pero McNabb no ha ayudado nada a mejorar el equipo.
Vick, que ya es el ídolo en Philadelphia, puede demostrar lo caprichosa que es la rueda de la vida. Atlanta está completando la mejor temporada de los últimos tiempos, con grandes expectativas. Y los Eagles, si ganaran la Super Bowl, lo harían sin Donovan McNabb.
En ocasiones es mejor estar calladito. Mira la carita que se le ha quedado a Rex Ryan. ¿O me lo parece a mí o se estaban ensañando con los Jets?
No aflojan y no dan opción a que los Saints se acerquen. No quiero pensar en la cara de alguno si Brian Finneran jugara una Super Bowl.
Para tener el juego de carrera destrozado por las lesiones, el novato no lo está haciendo nada mal. Curioso que los dos mejores corredores novatos del año (Ivory y Blount), no fueran seleccionados en el draft.
Derrotando a los Ravens se han hecho (si no cometen errores) con la primera plaza de su división. A la ventaja que supone jugar con Polamalu, se le une el rigor del clima de Pittsburgh en enero.
Poco a poco han ido subiendo peldaños y casi están en lo más alto. ¡Qué interesante podría ser un enfrentamiento de playoff en Atlanta!