Quiniela irracional (Semana 5)
El fichaje de Moss por los Vikings ha puesto patas arriba la NFL. De repente todos los power rankings y los pronósticos han cambiado. Es curioso el terremoto que puede provocar un solo jugador. Mientras tanto, la primera oleada de sancionados ilustres vuelve a la competición: Brian Cushing llega a unos Texans que, sin él, ya parecen el equipo a batir en la AFC Sur; Big Ben regresa a unos Steelers que le han echado de menos mucho menos de lo esperado, y que descansan esta semana; y Santonio Holmes debutará en los Jets para intentar convertirse en el único arma que le falta al ataque de los Jets para ser demoledor.
Bills (0-4) a Jaguars (2-2) (Victoria local)
Esta semana estoy crecido y voy a apostar por que los cuatro equipos que no conocen la victoria van a salir del pozo simultáneamente. Ya se que lo lógico es que Maurice Jones-Drew se de un festín similar al que se dieron Tomlinson y Greene a costa de la lamentable defensa contra la carrera de los Bills, pero también pienso que Fitzpatrick le ha dado otro aire a los de Buffalo y que Spiller, sin competencia por la posición de corredor titular, empezará a jugar a muy buen nivel. Además, los Jaguars bajan mucho su rendimiento como visitantes y los Bills muestran su cara menos mala en casa.
Ravens (3-1) a Broncos (2-2) (Victoria local)
Los Broncos tienen un extraordinario juego de pase, con un Orton que está cerrando muchas bocas, pero un nulo juego de carrera. Jugar con un ataque unidireccional es darle mucha ventaja a una defensa tan experimentada como la de los Ravens. Flacco sigue sin impresionarme, a pesar de su decisivo papel en los últimos minutos contra los Steelers, y necesitará jugar mejor que hasta ahora frente a la defensa de Denver, que a la chita callando está siendo bastante eficaz en todos los aspectos del juego. Creo que los Ravens ganarán, pero que será un partido muy reñido. Si los Broncos se imponen, habría que empezar a tenerlos en cuenta.
Colts (2-2) a Chiefs (3-0) (Victoria local)
Hasta ahora nunca he apostado por una victoria de los Chiefs, y seguiré sin hacerlo una semana más. La mejor arma de los de Kansas es el juego de carrera. La pareja Jamaal Charles-Thomas Jones está causando estragos allá por donde pasa y la defensa de Indianapolis contra la carrera es un auténtico coladero. A pesar de ello, no estoy preparado para aceptar que los Colts de Manning puedan perder dos partidos consecutivos, y más como locales.
Packers (3-1) a Redskins (2-2) (Victoria visitante)
Los Redskins volvieron a desaparecer del partido durante gran parte de la segunda mitad frente a los Eagles. Les salvó la inoperancia del ataque de Filadelfia. Pero esta semana no tendrán enfrente un ataque tan tierno. Aaron Rodgers, pese a la poca ayuda que recibe de su backfield, puede decidir el partido con un solo bajón de juego de sus rivales, así que no se qué conseguirá con los múltiples que suelen sufrir los Redskins. Ah, y Portis es baja.
Lions (0-4) a Rams (2-2) (Victoria local)
Los dos son equipos que vienen de lo más profundo, pero también están mejorando casi cada semana. Shaun Hill no es Stafford, y posiblemente no saque todo el partido al gran grupo de receptores que tienen los Lions, pero yo creo que está cumpliendo bastante dignamente. Jahvid Best está tocado, y tal vez ese sea el mayor hándicap de los de Detroit, pero ambos equipos tienen marcado este partido como una victoria indispensable y, pese a lo que pueda parecer, tal vez sea uno de los duelos más atractivos de la semana. Apuesto por los Lions porque creo que harán valer su condición de locales.
Panthers (0-4) a Bears (3-1) (Victoria local)
Esta es la Victoria de un 0-4 que me parece más improbable, pero, aún así, me voy a lanzar a la piscina. El problema para los Panthers es la ausencia segura de Steve Smith y la casi segura de DeAngelo Williams, con lo que Clausen no contará con su mejor arma y Jonathan Stewart estará solo en el backfield. A pesar de todo, no me creo que Cutler esté completamente recuperado de su conmoción, y ya quedó claro la semana pasada que sin él los Bears juegan sin QB, así que apuesto por Carolina dando por hecho que los de Chicago aún no se han recuperado de la paliza de Nueva York.
Bengals (2-2) a Bucs (2-1) (Victoria local)
La derrota de los Bengals el pasado domingo me pareció un ‘pequeño’ accidente y los Bucs, pesa a su magnífico arranque, me siguen pareciendo un equipo que necesita aún mucho rodaje.
Falcons (3-1) a Browns (1-3) (Victoria visitante)
Esta semana no estoy apostando por demasiadas victorias visitantes, pero creo que, pese a su sorprendente victoria de la pasada jornada frente a los Bengals, los Browns no tienen armamento suficiente para enfrentarse a unos Falcons que saben ganar de muchas maneras distintas.
Texans (3-1) a Giants (2-2) (Victoria local)
Los Giants mejoraron una barbaridad en cuanto Eli Manning fue capaz de jugar un partido sin fallos. Además, recuperaron la agresividad defensiva que siempre ha caracterizado a los equipos de Coughlin, pero este año los Texans son un equipo con suficiente carácter como para superar cualquier adversidad. Andre Johnson es duda, pero vuelve Cushing, con lo que la defensa de Houston mejorará tanto contra la carrera como contra el pase. Otro partido que puede ser muy reñido si Matt Schaub vuelve a jugar por debajo de su nivel.
Saints (3-1) a Cardinals (2-2) (Victoria visitante)
Los Cardinals jugarán con Max Hall como quarterback titular. Punto.
Cowboys (1-2) a Titans (2-2) (Victoria local)
Los Cowboys vuelven de descansar, replantearse la temporada y empiezan de cero en una división en la que nadie ha aprovechado su caraja. Vince Young no está siendo este año el revulsivo en el que se convirtió tras su vuelta a la titularidad en 2009, y Chris Johnson no tendrá tan fácil correr ante la defensa de Dallas. Romo y compañía deberían darse un pequeño festín que les devuelva la confianza.
Chargers (2-2) a Raiders (1-3) (Victoria visitante)
Los Chargers no pueden permitirse el lujo de perder este duelo divisional y deben demostrar de una vez que son capaces de jugar lejos de San Diego al mismo nivel que en su casa. Los Raiders han mejorado bastante, pero la suerte no les está acompañando. Tal vez sea un partido más apretado de lo esperado.
49ers (0-4) a Eagles (2-2) (Victoria local)
Los Eagles han salido muy tocados de su derrota en casa frente a los Redskins, y Kolb comienza a jugar con la ansiedad del que está perdiendo el tren de su carrera profesional. Los que pueden perder el tren de la temporada son unos 49ers que tendrían casi imposible sobreponerse a un récord 0-5 por muy mala que sea su división. En pocos partidos hay tanta gente jugándose tantas cosas.
Jets (3-1) a Vikings (1-2) (Victoria local)
Todo el mundo está convirtiendo a Randy Moss en el factor desequilibrante de este partido, pero parecen olvidarse de que los Jets lo tienen estudiado al dedillo después de tantos años de rivalidad divisional. Suena un poco raro decirlo, pero Favre vuelve a su antigua casa, tendrá ganas de demostrar que lo del primer mes de competición ha sido un accidente, y puede llevarse algunas sorpresas desagradables ante la terrible secundaria de los Jets. Insisto en lo que llevo diciendo desde el principio de la temporada, el arma letal es Peterson y ahora, con la llegada de Moss, se vuelve más letal todavía. Ganar a Rex Ryan en Nueva York es muy difícil y creo que estos Vikings no serán capaces de hacerlo aunque, si lo consiguen, volverán a convertirse, automáticamente, en grandes favoritos de la Nacional. Ah, se me olvidaba, se ha hablado tanto del fichaje de Moss que nadie recuerda que Santonio Holmes convertirá el juego de pase de los Jets en peligrosísimo.
Descansan: Dolphins, Steelers, Patriots, Seahawks.