El domingo de Indianápolis, la información de MotoGP del AS se titulaba: “Rossi toca fondo y Spies desafía a Lorenzo”. Con eso no quería decir que Rossi estaba acabado, como un seguidor me dijo en Twitter, pero sí que ése no era el Valentino al que estábamos acostumbrados, que nos lo habían cambiado.
El Doctor se había caído dos veces el sábado y en el warm up del domingo sumó una tercera… Con tal panorama queda claro que algo pasa, pero el qué. A mí se me ocurren cuatro posibilidades. A ¿Su bajo rendimiento es fruto de su estado de forma, aún flojo por la fractura de tibia y peroné de Mugello? B ¿Tiene la cabeza puesta ya en Ducati? C ¿Yamaha, ante su inminente despedida, le boicotea a favor de Spies y Lorenzo? D ¿Simplemente el tiempo pasa para todos y ya no será más el que fue?
Os propongo que dejéis vuestras respuestas en los comentarios de este post y que si os ocurren otras dejéis constancia de ellas. Para mí, de las cuatro, la que más visos tiene de ser es la B, la de que tiene la cabeza ya puesta en Ducati y el año próximo. Lo pensaba antes de que el propio Kevin Schwantz me lo dijera el domingo tras las carreras. Por cierto, que el Pajarito me regaló su gorra del 34 con la bandera tejana, y no me refiero a una gorra con sus colores sino a la que llevaba él puesta en su cabeza. Un tesoro que guardaré siempre.
Antes de acabar, querría mandar desde aquí mis mejores deseos de ánimo y recuperación para Fonsi, que permanece en el Methodist Hospital de Indianápolis. Las lesiones en el pie izquierdo, con seis fracturas en el calcáneo y otras seis en el astrágalo, son anecdóticas comparadas con el susto del domingo por la noche. Me refiero a la parada respiratoria que le tuvo más cerca del otro barrio que de éste durante algunos segundos. Os paso el enlace completo de su entrevista en el AS: http://www.as.com/motor/articulo/medico-dijo-estuve-muerto-minuto/dasmot/20100901dasdaimot_2/Tes.
Por si alguno le da pereza leerlo todo, os paso el párrafo en el que el madrileño describe lo vivido:
Pregunta: Me alegro más que nunca de verle, porque casi le perdemos el domingo por la noche ¿Qué pasó?
Respuesta: La verdad es que yo no me di cuenta de mucho. Los que peor lo pasaron fueron los que estaban aquí conmigo, mi tío Ángel, mi amigo Pato y, sobre todo, mi primo Pablo, que estaba a mi lado. Recuerdo que tenía un dolor insoportable, que me metieron un pinchazo de no sé qué y que me quedé dormido mirando la jeringuilla cuando iba por la mitad. Fue como en las películas, y lo primero que recuerdo es gente gritando en inglés, muy fuerte, mientras yo estaba con los ojos cerrados. Lo siguiente fue un ruido muy fuerte, los soplidos de la máquina de reanimación con oxígeno. Y luego, nubes blancas antes de abrir los ojos y gente gritando alrededor. Me quité la máscara con las manos y ya vi como a treinta médicos con tal cara de felicidad que parecía que les había tocado la lotería. Estaba tiritando y sudando como si me hubieran tirado a una piscina, rodeado de papeles de jeringuilla por encima y me di cuenta de que había pasado algo gordo, muy gordo...
Pregunta: ¿Le explicó su primo Pablo lo que había ocurrido?
Respuesta: Sí, pero antes vi a la doctora que me estaba tratando y cómo se fue llorando. Yo he tenido muchas operaciones y anestesias, pero nunca ha sido ni parecido a cómo me dormí el domingo. Fue muy diferente y al despertar empecé a gritar: "Where is my cousin? Where is my cousin" (¿Dónde está mi primo?). Pablo vino llorando y me dijo que estaba vivo de milagro. El médico me dijo lo mismo, que había estado un minuto muerto.
PD: Mucho ánimo también para Álex Debón, que aunque él sí que pudo regresar a España tras su caída en Moto2 de Indy, lo hizo con la clavícula derecha otra vez rota. El pobre está gafado.