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Peladillas finales

Todos los años, en mi casa dejamos los dulces de Navidad en una bandeja. Poco a poco se va consumiendo pero sobrevive de sobra a las fechas señaladas. También cada año soy yo, en esas veladas nocturnas de football americano, el que consumo los últimos restos. Casi siempre terminan sobreviviendo unas pocas peladillas, ya pegajosas por el tiempo pasado y la calefacción. Durante la Super Bowl di buena cuenta de ellas. Así que, haciendo un silogismo fácil, la Navidad en mi casa dura hasta la Super Bowl.

Por eso quiero aprovechar para cerrar la temporada dejándoos unas últimas peladillas. Un cierre dulce de lo que ha sido la temporada. Y tranquilos, no hace falta que lo pidáis más, ya estoy preparando un artículo sobre Tim Tebow.

Conferencia Americana: Me da igual lo que digan las estadísticas, este año los equipos más potentes estaban en la Nacional, creo que estamos en un nuevo cambio de tendencia.

Patriots. Como demostró Shanahan en los Broncos, un récord positivo anual no convierte en ganadora a una dinastía en decadencia. Belichick necesita un año sabático.


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Jets. Rex Ryan ha vuelto a demostrar que esta es una competición de entrenadores.

Dolphins. Mucha imaginación, mucha ansia de victorias y mucha historia, pero el coordinador defensivo se fue a la calle al día siguiente de acabar la temporada.

Bills. Si tu arma secreta para entrar en postemporada es el ataque sin reunión, lo mejor es que te despidan lo antes posible.

Colts. Llegaron a la Super Bowl en un año de transición. Mientras siga estando Manning serán aspirantes.

Texans. Un equipo plagado de joyas que no termina de brillar. Están a un acto de fe, y un buen kicker, de ser los nuevos Cardinals.

Titans. No me puedo explicar que un sabio como Fisher fuera el último individuo del mundo de la NFL en darse cuenta de que Vince Young debía ser el titular.

Jaguars. Lo peor que se puede decir de cualquier equipo, en cualquier deporte, es que es insípido.

Bengals. No me los creí hasta el final y entonces demostraron que ellos tampoco creían en si mismos. Palmer jugó con una sola mano, tal vez por eso que nunca fue un factor desequilibrante.

Ravens. Todo el mundo quiere a Flacco pero él nunca da un paso adelante ante los rivales de verdad. El año que viene ya no le perdonarán que se esconda.


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Steelers. Es curioso, cuando mejor juega Big Ben más se echa de menos a Bill Cowher.

Browns. Llevan tanto tiempo decidiendo quién es su QB titular, que han olvidado lo que es jugar al football americano.

Chargers. ¡Qué gran equipo campeón se está perdiendo la NFL de los últimos años por no tener un buen head coach!

Broncos. McDaniels fue el incentivo al principio y el detonante de la debacle final. ¡Madura!

Raiders. La mejor defensa de la NFL quedó desactivada por el peor QB, el peor head coach y el peor propietario.

Chiefs. Ya lo dije al principio de la temporada: recuperarse de haber tenido a Herm Edwards como head coach es un trabajo arduo de varios años.

Conferencia Nacional. Media conferencia a sido la culpable del gran nivel global de esta temporada.

Cowboys. Ya han conjurado todas las maldiciones, ahora sólo les falta el último empujón.

Eagles. Creo que ya estamos de acuerdo tanto sus detractores como sus defensores: McNabb debe dejar su puesto a Kevin Kolb. El veterano debe asumir que nunca alcanzará su sueño de ser el segundo QB negro en ganar una Super Bowl como titular.

Giants. Coughlin ya vio, hace tiempo, como los Giants se le desmoronaban desde dentro del vestuario; en primavera hizo una limpia y poco después le ganó la Super Bowl a los Patriots.

Redskins. Todo el mundo señala a Jason Campbell, pero Portis ha jugado una temporada lamentable.


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Vikings. ¿Quién iba a decir que el talón de Aquiles del mejor equipo de la temporada iba a ser Peterson y sus manos?

Packers. Su impresionante transición a 3-4, con jugadores que nadie veía aptos para ese esquema, quedó truncada por su frágil línea ofensiva y sus carencias en el back field.

Bears. ¿Para que fichas a un pistolero si no le vas a dar balas?

Lions. Tal vez haga falta otro desastre natural para que los Lions se conviertan en un equipo de football.

Saints. La peor noticia para todos sus rivales es que aún tienen mucho margen de mejora.

Falcons. Tengo la sensación de no haber visto jugar a los auténticos Falcons en toda la temporada… pero ni yo ni nadie.

Panthers. Jugar toda la temporada con 10 y desaprovechar el mejor backfield de la NFL sólo es culpa de John Fox.

Buccaneers. Haber ganado a los Saints no justifica una temporada perdida.

Cardinals. El legado final de Warner estuvo a la altura del mito. Los Cardinals volvieron a ser sinónimo de espectáculo.

49ers. Me da la sensación de que Singletary está en un callejón sin salida. Su mentalidad chirría en la cuna de la west coast offense.

Seahawks. Lo único bueno del paso de Mora es que ahora pueden empezar totalmente de cero.

Rams. Spagnuolo, tío, un equipo con Steven Jackson en el backfield no puede tener el número uno del draft. Tal vez debieras volver a coordinar alguna defensa ganadora.