¡Qué hay de nuevo! Ha pasado mucho tiempo desde el último post, con motivo de la coronación de Valentino Rossi en Sepang, y hay un montón de cosas que comentar, así que las iré lanzando poco a poco.
2009 se va y la temporada acabó en Valencia, con la resolución del título de 250cc a favor de Hiroshi Aoyama, que a punto estuvo de acabar en manos de Marco Simoncelli. Antes de que el italiano se cayera, cuando rodaba primero, el japonés se pegó un paseo por la agricultura que pudo costarle muy caro. Tal es así, que tuvo la brillante ocurrencia de decir en la posterior rueda de prensa que Kato le había ayudado desde el cielo para evitar que se estampara. Lo dijo con mucho sentimiento y a mí me puso la carne de gallina, pero eso no quita para que siga pensando que el título de dos y medio este año no se lo ha llevado el mejor piloto. Ése era Simoncelli, pese a sus marrullerías conocidas y previa cruzada de cable.
En Valencia vivimos un magnífico triplete español gracias a las victorias de Pedrosa, Barberá y Simón. Es el tercero que me toca vivir como enviado especial a las carreras (Le Mans 2003, Gibernau, Elías y Pedrosa; y Gran Bretaña, Pedrosa, Lorenzo y Bautista), aunque éste me puso menos que los anteriores porque ya no había ninguna esperanza española de título. Como se ve, Pedrosa es el único que ha estado presente en los tres tripletes y es algo que le engrandece. Cuando Stoner se cayó inexplicablemente en la vuelta de calentamiento, Dani se convirtió en el favorito número uno a la victoria. La consiguió como más le gusta a él, mandando de principio a fin y controlando por la pizarra a Rossi y Lorenzo. El triunfo de Barberá, heredado por la caída de Simoncelli, le sirvió para hacerse con el subcampeonato y demostrar que este año podía haber sido el suyo de no haber sufrido una de sus clásicas pájaras a mitad de curso. En cuanto a la victoria de Simón, fue la del desquite a sus malas actuaciones en las carreras de casa y la guinda a un año espectacular.
La temporada dejó un nuevo récord de podios y victorias (71 y 22) para el motociclismo, aunque con un solo título, el de Simón en 125cc. A ese oro hay que sumar las platas de Lorenzo y Barberá, más los bronces de Pedrosa y Terol. Para mí son unos resultados fantásticos y, aunque sigue siendo una asignatura pendiente el título de MotoGP, cada vez lo siento más cerca. Aunque en el periódico, lógicamente, le demos más bola a la clase reina, me alegro casi más de los éxitos en 125cc y 250cc que con los de MotoGP, porque los entiendo como la manera de poder seguir luchando en un futuro en la clase reina como ahora lo hacemos.
¿Recordáis la porra que propuse a principio de año en el blog, aquella en la que pedí a mis colegas de profesión y a los blogeros el Top 5 de MotoGP para la temporada 2009? Pues bien, el título de campeón ha quedado desierto en esta ocasión, así que el premio que tenía pensado, y no era un jamón, me lo guardo en casa para el año siguiente. Parece fácil, pero nadie fue capaz de predecir que la clase reina acabaría así: Rossi, Lorenzo, Pedrosa, Stoner y Edwards. En su día me inventé un sistema de puntuación para ver cuáles eran las previsiones mayoritarias y, aunque tanto periodistas como blogeros apostaron por Rossi como campeón, nadie imaginaba que el subcampeón podía ser Lorenzo. El Top 5 de la Prensa era Rossi, Stoner, Pedrosa, Lorenzo y Dovizioso. El de los Blogeros, Rossi, Stoner, Lorenzo, Pedrosa y Dovizioso. Como se ve, la única diferencia en ambos pronósticos era el intercambio de posiciones entre Lorenzo y Pedrosa. Los fieles de BOX34 sabían más que los periodistas. Je je je. Os felicito.
250cc desaparece y en su lugar llega Moto2, una categoría de 600cc y motores monomarca (Honda) de 4T en la que no estará Aprilia. Primero dijo que no, luego que sí y finalmente que no. Ellos sabrán lo que hacen y, sinceramente, tampoco creo que se les vaya a echar mucho de menos, Aspares y demás al margen. Además, de alguna manera es lo lógico, ya que la tiranía de la marca de Noale fue uno de los factores de acabó con la maravillosa clase de dos y medio. Los precios desorbitados de sus motos y, en numerosas ocasiones, sus caprichosas decisiones en favor de uno u otro piloto, se han acabado o, mejor dicho, reducido a la mitad, porque 125cc será su cortijo y ahí podrán campar a sus anchas hasta que el promotor acabe con la categoría y la cambie por otra con motores de cuatro tiempos mucho más barata. De Moto2 ya hablaremos largo y tendido, pero vaya por delante que me parece una categoría tan abierta que puede deparar sorpresas al estilo de la Fórmula 1 de este año, la del título Jenson Button, el patito feo de Inglaterra eclipsado por Lewis Hamilton hasta la llegada del difusor doble de su monoplaza.
Del regreso de las MotoGP a los 1.000cc ya hablaremos también más adelante. Aún no tengo definida mi posición del todo, pero tras entrevistar a Carmelo Ezpeleta, el sheriff del paddock, me queda la esperanza de que, como él dijo, la electrónica tenga menos incidencia en el comportamiento de las motos y el pilotaje de los pilotos. Eso sí, hubiera preferido que la limitación del diámetro de los pistones a los 81 milímetros hubiera sido hasta los 86mm, como las viejas 990cc, pero eso hubiera hecho que se elevaran los costes y la idea es rebajarlos. Aún así, seguirán siendo motores más potentes que los de las Superbikes, con un techo de unas 16.000 rpm y unos 230 CV de potencia.
Otra de las perlas que nos deja 2009 es la renovación de Lorenzo con Yamaha, pero por sólo un año, con lo que en 2010 tendremos un mercado de fichajes más animado que nunca, con los cuatro fantásticos quedando libres al finalizar el campeonato. Rossi, Lorenzo, Pedrosa y Stoner nos van a dar este año nuevo tanto juego fuera como dentro de la pista. Por cierto, aprovecho para lanzar una pregunta al aire: ¿Creéis que Lorenzo hizo bien renovando con Yamaha o que debería haber aceptado las ofertas de Honda o Ducati? Personalmente, me hubiera gustado verle con la Ducati en 2010…
Uves y Ráfagaaaaaaaas para todos y Próspero Año Nuevo.
PD: Tras unas inmerecidas vacaciones, he desembarcado hoy en la nueva redacción del AS y, casualmente, el primer gol que he visto en la televisión es uno que le acaba de meter al Barcelona un jugador del prestigioso Kazama Sporting, de Kuwait, el afamado Abdulah. Es una buena forma de empezar a digerir el dichoso sextete y algo me dice que un buen augurio.