Cuando Juan Carlos encontró a Pau
Las vidas de Juan Carlos Navarro y Pau Gasol siempre estarán ligadas y más aún ahora que vivirán juntos sus sueños de competir en la NBA. Finalmente, el esfuerzo de Pau ha tenido su recompensa y además Memphis solucionará el problema de tener contento a su jugador franquicia.
Si hay alguien que ha insistido a Navarro para que diera el paso de ir a la NBA ese ha sido siempre Pau Gasol. Mientras la ‘bomba’ prefería quedarse en Europa y estabilizarse, su amigo de Sant Boi se arriesgaba a dar el paso. Poco a poco Gasol fue acelerando en su presencia en la liga norteamericana y cumpliendo fases hasta pasar a ser una estrella.
Su compañero pasaba de la nostalgia de aquel “¡Se nos va Pau!” con el que despertó al preparador físico y amigo de ambos Pepiño Casal aquella madrugada del draft a recibir los apremiantes reclamos de su amigo en los Grizzlies. Varios años después decidió dar el paso, pero su contrato en el Barcelona suponía un gran obstáculo con el que no había contado demasiado.
La situación se había complicado con el tiempo porque en los Wizards las cosas habían cambiado mucho en la directiva desde que se fijaron en él y adquirieron sus derechos. Además, el resto de equipos que buscaban su fichaje se han encontrado con las reticencias de los de Wasinghton a reforzar a un rival de Conferencia, mientras el Barcelona ponía un tiempo límite para que Navarro cerrara su salida antes del 3 de agosto o se quedaría en la Ciudad Condal.
Quien tiene un amigo tiene un tesoro
Todo parecía aún más peliagudo y de nuevo su amigo acudió al rescate. Gasol ha presionado al cuerpo técnico y al final han conseguido que los Grizzlies se hicieran con los servicios de Juan Carlos. Un nuevo empujón de su compañero –“una buena mano” según el representante de Navarro- y muchas circunstancias a su favor para triunfar en la NBA. El tiempo dirá si la apuesta de Pau ha sido acertada porque también se verá obligado a permancer en Memphis.