El privilegio de Vujcic
El baloncesto europeo cuenta con uno de los jugadores más completos y con mayor nivel. Se trata de Nikola Vujcic, pívot del Maccabi de Tel Aviv, un talento que ningún equipo rechazaría. En la jornada de esta semana ya consiguió ser el mejor reboteador (10 capturas), y el mejor asistente (8 pases), algo que se ha convertido casi en habitual para este croata.
Nikola Vujcic aporta a su equipo rebotes, asistencias, anota y si es necesario el subcampeón de Europa recurre a él en los últimos minutos. Para el Maccabi es un auténtico privilegio tener a un jugador de élite como él tras la marcha de Sarunas Jasikevicius y Anthony Parker a la NBA. De hecho, el club israelí –primero en ganar a un equipo de la liga norteamericana en territorio estadounidense- ha vuelto a ser este año otro de los favoritos a ganar la Euroliga gracias al concurso del dálmata.
El valor de Vujcic reside en su capacidad para colaborar en todas las facetas. De hecho, es el único jugador que ha sumado un triple-doble desde que se creó la Euroliga: en 2005 ante el Prokom polaco anotó 11 puntos, cogió 12 rebotes y dio 11 asistencias mientras que en 2006 sumó 27 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias ante el Olimpia de Ljubiana esloveno.
Vujcic procede de la cantera del KK Split, donde se han formado grandes talentos como Toni Kukoc, Dino Rađja, Zan Tabak, Zoran Savic, Velimir Perasovic o Dusko Ivanovic. El croata llevó en su club en número 7, que en otros tiempos llevara en el club Kukoc.
Los ojeadores del Maccabi le ficharon en 2001 para sustituir a Nate Huffman y desde entonces ha permanecido en el club –aunque estuvo cedido en el Villerbaurbanne que ganó su primera Liga en 21 años-. En Tel Aviv ha logrado dos Euroligas, además del tradicional doblete en Israel y todavía tiene dos años más de contrato.
Real Madrid y Tau han pujado con fuerza por este excelente pívot de 2,11 metros que se mueve con agilidad dentro y fuera de la pintura, pero el croata no ha querido marcharse de su club salvo que llegara una gran oferta.
Su muñeca yugoslava, su competitividad, sus recursos para aprovechar su cuerpo poco corpulento y una capacidad de pase poco habitual en jugadores interiores (al estilo de Tomasevic) le hacen destacar en Europa. Sólo una mala temporada del Maccabi o un gran contrato se lo llevarán de Tel Aviv, por lo que por ahora tendremos que disfrutarlo en la Euroliga, donde promedia 16,9 puntos, 7,9 rebotes, 4,4 asistencias y 1,1 robos por partido. Un auténtico hombre para todo.