El éxito de Joan Plaza
En verano Bozidar Maljkovic fue cesado como entrenador de baloncesto del Real Madrid con la llegada del nuevo presidente Ramón Calderón. Tras buscar la contratación de entrenadores de prestigio el club se decidió por ascender a Joan Plaza, segundo de Maljkovic, quien se ha convertido en la revelación de la temporada al llevar al equipo a pelear por el título de la ACB y conseguir una racha inicial de 13 partidos invictos.
Dos entrenadores se negaron a firmar por el Real Madrid este verano. Ni siquiera la presencia potencial de Vlade Divac consiguió convencer a Repesa para que dejara la selección de Croacia –en España no está permitido compaginar el trabajo de seleccionador con el de entrenador de un club-. Tampoco Aíto García Reneses dio el sí porque se le presentó la posibilidad con demasiada premura cuando tenía apalabrada su renovación con el Joventut.
Y finalmente la oferta llegó a Joan Plaza, el hombre que había sido segundo de Bozidar Maljkovic en la última temporada y que era un auténtico desconocido para la mayor parte del público. Ha pasado medio año y los aficionados del club celebran aquella decisión porque al fin el Real Madrid se encuentra entre los grandes del baloncesto nacional sin titubeos.
Ahora Plaza recibe halagos por su discreción, por su faceta de estudioso del baloncesto y trabajador, pero sobre todo por haber instaurado en el grupo la idea de equipo que tan de moda se ha puesto en el baloncesto en el último año. El conjunto cuenta con un juego vistoso y efectivo en el que las rotaciones son un factor desequilibrante.
Pero el principal éxito de Joan Plaza es que en todos los clubes se ve su figura como un ejemplo a seguir. El técnico catalán sigue en un segundo plano, pero tampoco es un hombre que calle sus opiniones. Para empezar, no duda en señalar que no echan de menos a Igor Rakocevic en el equipo a pesar de que sea el máximo anotador del Tau. Tampoco ha querido dejar pasar la oportunidad de señalar que le hubiera gustado recibir una llamada de Boza para felicitarle cuando fue designado por Alberto Herreros y Antonio Martín como su sucesor.
Cuando acabe esta temporada el técnico catalán habrá dejado un legado difícil de superar no sólo en las estadísticas sino también como paradigma de entrenador. Ambicioso, exigente, perfeccionista y valiente, Joan Plaza tiene el respeto de toda la ACB en la temporada de su debut tras asumir un papel difícil y tras un inicio en el que la desconfianza sobre sus capacidades fue el tema principal de sus detractores –a pesar de llevar 28 años como entrenador-. Ahora queda por ver quién sigue su ejemplo y con similares resultados.
Joan Plaza contestará a vuestras preguntas el jueves 11 a partir de las 13:30. Pincha aquí para enviar