Opinión Editorial

El barcelonismo puede ser como generoso. De montar una pañolada descomunal a Joan Gaspart, como años después le ovaciona en las asambleas cuando toma la palabra.

El Madrid es el vigente Campeón de Europa, es el vigente Campeón de Liga, es el vigente Campeón de la Supercopa de Europa y, desde hoy, es el vigente Campeón del Mundo de Clubes.

Como era de esperar, los egipcios del Al Ahly presentaron batalla y obligaron al Madrid a competir de la mejor manera para conseguir el pase a la final.

Permítanme que les exponga algún dato. El Madrid disparó siete veces a puerta y ocho fuera (algunas de ellas, fuera por muy poco). Además, otros cinco remates en zona franca fueron taponados por los defensas de la Real...

La selección francesa no pudo repetir hazaña y cayó ante Argentina en la tanda de penaltis, como ante Italia hace 16 años.

Seguramente no veamos a Modric en otro Mundial, aunque con 41 años aún tendría gasolina para jugar el siguiente. Parece demasiado pedirle a un futbolista que ha llevado a los croatas a lo más alto que jamás hubieran imaginado en este torneo.

Luis Enrique nos deja. Ha tardado demasiado tiempo porque no había necesidad de esperar 48 horas. Según acabó el partido calamitoso, horrendo y sonrojante ante Marruecos debería haber presentado su dimisión.

Siempre me ha parecido un poco ridículo sacar grandes conclusiones después de la fase de grupos de un Mundial o de una Eurocopa.

Me consta que en el orgullo del vestuario del vigente campeón de Europa y de Liga sentó mal que los sesudos analistas de France Football decidiesen que el mejor equipo de la temporada pasada fue el City.

Ancelotti apostó por Kroos como mediocentro defensivo y con Alaba en el lateral izquierdo en lo que, probablemente, sea el once más ofensivo que puede sacar dentro de los teóricos “titulares”.

Guion esperado en el Clásico. Un Real Madrid protegido, con las líneas juntas y defendiendo bien los carriles interiores, agazapado, esperando a que el Barça se expusiera para hacer daño a la carrera.

El Bernabéu más universal se pegó un festín a costa de un Barça quebradizo y con escasos recursos. Ni futbolísticos ni anímicos. Antes del Clásico me crucé con madridistas llegados de Honduras, El Salvador, Cuba, Nicaragua, Perú, Colombia.

El Barça acabó en la lona el Clásico, pero Xavi, que corrió peligro de terminar con un KO demoledor que hubiera complicado mucho su proyecto de manera inmediata, se salvó. De momento, seguirá en observación. Pero también bajo sospecha.

No ha sido un partido para exportar por su calidad más allá de nuestras fronteras. Pero a medida que se acerque el Mundial vamos a ver muchos encuentros marcados por la dosificación de esfuerzos.

El gol de Militao tras la salida de un córner condicionó el desarrollo del juego. El Madrid se sentía muy cómodo sin arriesgar demasiado en la construcción de los ataques ante un Getafe que dio la sensación de no tener un plan b.

El Valencia ganó donde quizás a priori menos parecía que pudiera hacerlo, pero lo hizo con solvencia, jugando al toque y al rebote.

No resulta más fácil ejercer como entrenador que como periodista, no. Lo complicado, tanto en una profesión como en la otra, está en conocer el paño, acertar más que fallar.

El gol de Jordi Alba, a pase de Asensio, no pudo maquillar la nefasta noche de la España de Luis Enrique. El patinazo en La Romareda obliga a ganar como sea a Portugal en su feudo.

La tarde empezó para mí a las 18:30 horas con los compañeros de Realmadrid TV. Se les ocurrió poner un resumen de la maravillosa trayectoria que nos llevó a la conquista de la 14 en París.

¿Lo de Cristiano y el Atleti es verdad? Esa es la pregunta que más me han hecho en las últimas semanas desde España.

Me figuro que la pole de Carlos Sainz convocaría ante la tele a un público no tan habitual de la Fórmula 1 como el que la sigue religiosamente. Fue una suerte, porque la carrera, además del final feliz,