Jude Bellingham

Algunos hablan de que Jude se parece a Di Stéfano, aunque eso son palabras mayores.

Lo tiene todo. No son sólo números. Su aparición ha sido tan deslumbrante como inesperada.

Bellingham tiene hechizado al planeta fútbol. Un jugador without limits. Un tipo que convierte cada aparición suya en el Bernabéu en un espectáculo de masas.

El mérito añadido es que logra eso sin menoscabo de su formidable trabajo en el medio campo.

El fútbol es política, y política es lo que ha llevado a la FIFA a dejar las candidaturas al Mundial 2030 en una sola.

Ganó el Real Madrid en Nápoles y no le resultó fácil. El partido tuvo el eco de los buenos partidos europeos: cambios en las ventajas, incertidumbre constante y un jugador hegemónico, en este caso Bellingham.

Ese carisma en el campo, su manera de celebrar los goles hasta convertirlo en un festejo icónico, su espíritu de lucha irreductible, su versatilidad para llegar al ataque con varios registros...