Razgatlioglu ya espera el título
El turco gana la carrera 2 de Estoril y protagoniza con Bulega el final más apretado de la historia de SBK en el esprint, que cayó del lado del italiano.
La jornada del domingo de la ronda del Mundial de SBK dejó el final más apretado en la historia del campeonato, con Bulega, vencedor, y Razgatlioglu separados por tres milésimas en el esprint. También presentó un nuevo triunfo del turco en la carrera dos que le acerca a su segundo título, que si no media nada paranormal celebrará en Jerez el próximo fin de semana. Tiene un colchón de 46 puntos y un podio el sábado en el Ángel Nieto posibilitará la fiesta de Toprak.
La carrera corta arrancó con el piloto de BMW en la pole y liderando desde que se apagó el semáforo. Petrucci, Rea y Locatelli perseguían a Toprak mientras que las Ducati de Bulega y Bautista recuperaban terreno. El italiano llegó a las posiciones de cabeza en la tercera vuelta y Bautista ganó, plazas hasta llegar al tercero, por la caída de Rea y sus adelantamientos a Petrucci y Locatelli. Razgatlioglu, que lideró desde el inicio, se vio superado a la salida de la última curva de la última vuelta por la Panigale de Bulega, que se llevó la victoria. Cuatro segundos después llegó el talaverano.
La manga dos se puso en marcha con los tres primeros de la Superpole en la primera fila y Bautista llegando a la primera posición tras una buena salida. Razgatlioglu bajó hasta el quinto y desde allí comenzó a quitarse rivales. Primero Rea y luego Locatelli. Por delante tenía solo a las dos Ducati del español y del italiano, y los alcanzó a falta de 17. Dos vueltas más tarde superó a Bautista, quien a su vez dejó pasó a Bulega, para que su compañero de box mantenga opciones, muy pequeñas, de título. Porque el ritmo del turco, como en la carrera del sábado, fue demoledor para sus rivales. Ganó con la facilidad que viene siendo habitual esta temporada y aventajó en algo más de tres segundos a la dupla de Borgo Panigale. Completaron el top-6 Jonathan Rea, con la Yamaha, Van der Mark, con la otra BMW y Xavi Vierge con una Honda cada vez más competitiva. Iker Lecuona, que logró un podio el sábado, no acabó la carrera por una caída, como tampoco finalizó Tito Rabat.