Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

MOTOGP

Yamaha no acierta con Quartararo

El francés sigue insistiendo en las debilidades de la M1 a pesar del séptimo en Portugal. “Tenemos muchos problemas y eso es peor que un solo defecto importante”, asegura.

Doha (Qatar), 07/03/2024.- French MotoGP rider Fabio Quartararo of Monster Energy Yamaha MotoGP attends a photo session at the Motorcycling Grand Prix of Qatar at the Losail International Circuit in Doha, Qatar, 07 March 2024. The 2024 MotoGP World Championship season's first race will be held at Losail International Circuit on 10 March. (Motociclismo, Ciclismo, Catar) EFE/EPA/NOUSHAD THEKKAYIL
NOUSHAD THEKKAYILEFE

Fue un fin de semana diferente para Yamaha en Portugal y aunque no hubo lugar para celebraciones ni tampoco para descorchar champán, si lo hubo para la esperanza. Por primera vez desde Sepang 2022, las dos motos japonesas consiguieron librarse del purgatorio de la Q1 y accedieron directamente a la lucha por una pole que siempre fue inalcanzable. Pero al menos el reconocimiento fue dejar provisionalmente a varios de los favoritos fuera de esa Q2 en la que hacía tiempo que la M1 no hacía acto de presencia. De hecho, su ausencia nunca ha sido casualidad sino una consecuencia de esa crisis de resultados por la que atraviesan y que ha dejado la continuidad de su campeón Quartararo en el aire.

Después de conquistar la corona con la marca de los diapasones en 2021, el francés lideró siempre un discurso prudente donde apelaba al tiempo como solución a todos los problemas de Yamaha. Pero ni siquiera dos años de transición han desencadenado un ápice de optimismo en un piloto que ahora, es más crítico que nunca. Desde que comenzó el curso Quartararo no ha dudado en poner sobre relieve los problemas de la M1 y ni siquiera el séptimo en Portimao le ha convencido. “Considerando el esprint de ayer (por el sábado), en términos de distancia estaba convencido de que terminaría más cerca de los primeros”, comenzó diciendo El Diablo, que vio la bandera a cuadros a más de 20 segundos de la cabeza.

Si las carreras fuesen tan exactas como las matemáticas y se doblase la distancia del esprint, la diferencia entre Quartararo y el ganador debería haber sido de 14 segundos (el sábado fue noveno a 7 segundos del vencedor), pero con unas condiciones de asfalto diferentes (bajó la temperatura), la gestión de neumáticos como protagonista y más adelantamientos de por medio, los seis segundos de diferencia pueden encajar. Pero no tienen por qué convencer al piloto francés.

¿Qué le falta a la M1 para que Quartararo la considere una moto competitiva y recupere su confianza en Yamaha? El campeón responde: “No se trata de una cuestión de aerodinámica solamente. No tenemos ningún problema grave o grande que resolver, hay muchos pequeños aspectos que debemos mejorar paso a paso como el agarre, en la electrónica, la geometría y la posición. Hay numerosos detalles que arreglar y eso es peor que un solo fallo importante. Por eso habrá que tener paciencia ya que con solo dos motos es difícil ser rápido en resolverlo”. ¿Cabe la posibilidad de que los japoneses ganen dos motos de cara al futuro? “Yo lo apoyo, pero no puedo decir nada más”, continúa el francés.

Se habla de que las negociaciones entre el VR46 Team de Valentino Rossi y Ducati no están siendo tan sencillas como se esperaba de entrada. El pasado del nueve veces campeón con Yamaha (logró cuatro títulos de MotoGP con los japoneses) sigue manteniendo con vida la relación entre ambas partes y aunque la prioridad del italiano es dotar a sus pilotos de un prototipo competitivo, confiar en las firmas asiáticas en la categoría reina siempre fue sinónimo de acierto. Pero para entonces, si llegase un hipotético acuerdo entre El Doctor y los de Iwata, puede que los diapasones ya hayan perdido a Quartararo.

Yamaha recopila “muchos datos”

La situación sería idónea si Yamaha hubiese ganado esas dos motos para esta misma temporada, pero las cosas no siempre salen como a uno le gustaría. De ahí que Quartararo se centre en el presente y sólo piense en qué pueden hacer con su situación actual. No hay mucho margen de maniobra, es evidente, pero los japoneses han “recopilado muchos datos” con los que esperan “dar un paso adelante”. ¿Cuándo? El francés prefiere seguir creyendo, pero vuelve a insistir en que todo el proceso evolutivo será cuestión de tiempo: “Recuperar todo lo que nos falta no será inmediato”. Y tanto el tiempo como la paciencia, se acaban.

Normas