Vuelve el mejor Márquez

Márquez se despide de los nubarrones que le perseguían desde hace mucho. Y nunca mejor dicho. El español, que desde este año milita con Ducati en el seno del Gresini Racing, por fin se ha vuelto a subir al podio en una carrera en seco. Es la primera con la casa de los de Borgo Panigale y, en palabras del español, “el mejor podio” de su carrera por poder cerrar el círculo en el trazado donde empezó su pesadilla. Fue casi cuatro años atrás, el 19 de julio de 2020, cuando comenzó un calvario que le obligaría a pasar cuatro veces por quirófano y que, unido a la gran crisis de Honda, acabaría confirmando su salida de la fábrica japonesa a finales de la pasada temporada.

Lo cierto es que la historia la conocemos todos, pero no deja de ser especial ver a un Marc Márquez recuperado después de todo. Y no solo eso, sino un octocampeón del mundo que puede decir que ya disfruta sobre su nueva moto, a la que ya está totalmente adaptado, y con la que suma podios, tanto en las esprint de los sábados como en las carreras largas de los domingos. Y qué podios: luchando cuerpo a cuerpo con Pecco Bagnaia, bicampeón del mundo, líder de la fábrica italiana y portador de una GP24 algo mejor que la del año anterior, esa que lleva el español en su condición de piloto de un equipo independiente. Pero si hay un detalle que prima por encima de todo, aparte de verle hacer ya de sus míticas salvadas, es el hecho de que esta segunda posición del podio llega en una carrera declarada totalmente en seco.

Han tenido que pasar 558 días para verle subir al cajón sin tener que enfundar un paraguas. Su último podio, uno de los más emotivos al ser el definitivo con Honda, fue en el GP de Japón de la pasada temporada. En Motegi, casa de la marca de la que se despediría apenas unas carreras después, pero pasado por agua. Y desde eso pasaron 210 días hasta el de Jerez. Pero si pensamos en una carrera en seco (y sin contar esprints, en los que ya suma cinco desde que se implantaron en 2023), la distancia aumenta hasta los casi dos años, cuando Márquez visitó el podio, también para recoger la plata del segundo puesto, en el Gran Premio de Australia, en Phillip Island, de 2022. Esa carrera acabó con una remontada memorable de Álex Rins en una de sus últimas carreras con Suzuki. Aquel día, al contrario que la pasada cita en Jerez, Marc sí pudo batir a Pecco Bagnaia en la última vuelta. Pero al italiano no le importó demasiado: con la caída de Fabio Quartararo, el de Ducati se ponía líder, a 14 puntos de distancia, para jugarse su primer título mundial a falta de dos carreras.