Tirón de orejas a Quartararo
Yamaha se planta ante los malos comentarios constantes de su piloto a la prensa: “Quejarse demasiado en público no ayuda al compromiso de la empresa”.
Fabio Quartararo lleva meses sin callarse nada. Y Yamaha varios meses aguantando el tirón de su piloto estrella. Mientras uno decía todo lo que pensaba de la moto y del trabajo de la fábrica, los otros se mordían la lengua y tragaban saliva buscando la calma. Pero, al final, todo acaba explotando. Y, antes de que le haga a gran escala, lo hace internamente en un modo mucho más sutil. Así que, después de llevar tiempo aguantando los comentarios del francés y las quejas ante la prensa sobre su moto, los de Iwata han dado un toque de atención a su piloto. Un leve tirón de orejas ahora que se ha acabado la temporada que, al final y al cabo, es eso, un aviso al campeón de 2021.
“Así no funcionan las cosas en Yamaha”, asegura con firmeza Paolo Pavesio, director de carreras de la marca japonesa. Sin filtro, sin pelos en la lengua, de la misma manera que Quartararo lo ha hecho con su equipo. El mensaje está más que claro para el francés, que debe parar sus amenazas a la marca con eso de que escuchará ofertas el próximo curso si la moto no es lo que prometen. Es decir, si la Yamaha no le da resultados u opciones a luchar con las marcas punteras, se pensará un cambio de fábrica. Allá donde le den armas para competir. Y, aunque están cansados de sus comentarios y mensajes a través de la prensa, de una cierta forma, el director entiende la posición del francés: “Desde una perspectiva humana, entiendo la frustración en ciertos momentos”.
Pero hay que entender que mantenerse unidos en la única forma de seguir adelante en los momentos de crisis. Por eso, Pavesio, en una charla con Speedweek, lanza el aviso: “Todos somos profesionales y estamos juntos en este camino. Le ofrecimos la oportunidad de correr para Yamaha y la aceptó. Lo que logró en los primeros cuatro años fue increíble porque el paquete se lo permitió. 2023 y 2024, por otro lado, fueron años muy malos, pero en el peor año, reafirmamos nuestro compromiso mutuo. En 2025, demostramos que podemos cambiar las cosas”. Y pone cifras sobre la mesa para mostrar la mejoría que han conseguido a lo largo del año: “Su diferencia promedio hasta la pole position el año pasado fue de 1.3 segundos. Este año fue de 0.35 segundos”.
“Salió desde la pole position cinco veces y desde la primera fila diez veces. La moto es obviamente mucho más rápida en una vuelta rápida, en parte gracias a él. La moto también es más rápida al sprint y un poco más rápida en la carrera larga. Pero cuanto más se alarga una carrera, más sufrimos”, insiste el italiano que, de cara a 2026, cree que pueden “construir una moto mejor” con el nuevo V4, los cual, “en última instancia, podría convencer a Fabio de que se quede” en Yamaha. Tras las pruebas de Valencia, el francés no estaba del todo convencido con el nuevo motor, pero todavía queda mucho invierno por delante para trabajar y, sobre todo, para seguir con esos cambios necesarios que le lleven de nuevo a lo más alto.
“Hemos reestructurado el departamento de carreras con gente nueva, tenemos un nuevo equipo, un proyecto de Moto2; todo esto nos llevará a un futuro brillante. Tenemos una visión a largo plazo e intentamos mejorar cada fin de semana y en cada carrera”, añade Paolo, pero todo pasa por acabar con esos comentarios ante la prensa que no hacen más que perjudicar la imagen de la marca y el equipo. “Quejarse demasiado en público no ayuda al compromiso de la empresa”, insiste, así que es algo que no volverán a consentir a Quartararo: “Las quejas públicas no forman parte de este proceso saludable”.
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